Y todo lo que me decías era mentira, cada palabra, cada verso, cada oración que pronunciaba tu inmunda boca eran falsas, así como tú, así como tu amor, pero los hechos han derrumbado el teatro y la falsedad de tu amor, todo está en el suelo, y yo... ya no tengo vendas, ya no tengo tapados mis oídos, ya tengo mis sentidos libres de tu maldito querer.