Nunca hemos sido de los que se rinden.

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Sara


"DanieloviedoM: No perdamos nunca esa costumbre de decir te quiero solo por miedo,  svxn_" 

Me fijo de nuevo en el tweet en el que me menciona Dani, ese en el que ha subido una foto nuestra y aunque no se me vea la cara, sé que a las fans solo les ha hecho falta entrar en mi twitter para ver millones de fotos mías que les ha permitido reconocerme. 

Suspiro y me encuentro en un momento en el que no sé qué hacer; no sé si sonreír por lo bonito que ha sido Dani o si cabrearme por sentir que no puedo hacer nada contra esas cuatro o cinco chicas que siempre tendrán algo malo que decir. Paso el dedo delicadamente por la foto y sonrío inconscientemente; al hacerlo se me desplaza el tweet hacia abajo y veo millones de respuestas.

"¿quién es ella?"

"pero qué bonitos son"

"Quien fuera ella"

"¿son novios? Joder!! "

"¿Alguien me explica que es esto?"

"Es tan goals que me da."

"¿qué ha pasado que no me estoy enterando de una mierda?"

"Me los como, tío"

"Joder, no puede ser verdad"

"Tan bonitos que duele, ayudaaaaa :c"


Cierro los ojos y apoyo mi cabeza en la pared en la que me encuentro apoyada. ¿Cómo se supone que debo tomarme todo esto? ¿debo apretar los dientes y sonreír sin más? ¿debo enfrentarme a ello y aguantar hasta que pueda aguantar? Sé que muchas de ellas, la mayoría quizás, se lo tomarán bien pero sé -muy en el fondo- que siempre me quedaré con los malos comentarios que haya. 

Decido entrar en mis interacciones y veo cómo echan humo así que no me quiero detener en ellos pero una imagen hace que mi atención se centre en ella. Le doy y suspiro sin darme cuenta de que había estado conteniendo la respiración hasta justo ese momento. 

"Es gracioso, la novia de dani es tendencia en twitter" leo el tweet mientras no puedo dejar de ver la foto donde mi nombre es tendencia en twitter. 

Bloqueo el móvil sin ni siquiera mirar nada más y lo guardo en el bolsillo de la sudadera. Toda esta atención que me están dando no puede estar pasando, no puede ser. Me niego. Trago saliva con dificultad sintiendo que me está faltando el aire y me prometo a mi misma que no voy a llorar, que no voy a hacerlo.

-Tía, ¿has visto twitter? -alzo la mirada al ver que María ya ha vuelto con una botella de agua en la mano. Se sienta a mi lado con una sonrisa pero al ver que yo no la tengo, la borra- ¿Qué pasa? -me pregunta preocupada.

-Ya sabes lo que pasa -la miro de reojo- no quiero este tipo de atención porque no he hecho nada para tenerla.

-La mayoría te apoyamos -susurra- y lo sabes -admite y niego con la cabeza.

-Pero ahí fuera hay algunas que no -digo más para mi que para ella- y sé que siempre van a tener más peso sus comentarios que los demás.

-Pero... -duda unos instantes- ¿por qué no solo te fijas en el detalle de Dani?

-¿Cómo quieres que me fije si con ese detalle tengo a miles de pares de ojos esperando cualquier movimiento de mi parte?  

-Entonces qué... -me reta mi amiga- ¿vas a dejar de hacer cosas que te apetecen solo porque van a creer que tú no eres suficiente para él? -pregunta y hago un gesto con los hombros como si no me importara- Sara... -susurra poniendo una de sus manos en mis piernas- ¿verdaderamente vas a seguir pensando así de mal de ti? -pregunta como si nada cuando realmente es una de las preguntas más jodidas que alguna vez podrán hacerme.

¿Cómo se te puede querer tan fuerte? (II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora