Querido Mikaela 【MikaYuu】

A medias

15

Mientras vamos en el tren Yuu me dice muchas cosas.

—A veces sonreír y reír son la mejor medicina para olvidar penas —suelta—. ¿Sabes? Cuando solía sentirme triste y enojado mi padre me llevaba al parque de diversiones y me subía a esos juegos donde la adrenalina te hace gritar y querer más —comenta. Y yo sonrío un poco.

A veces hablar con él suele ayudarme, así como cuando Y. H. me deja cartas. Y me pregunto con frecuencia porqué comparo a Yuu con Y. H.

—¿Alguna vez has estado en algún parque de diversiones? —pregunta.

—No —murmuro.

—Me alegra que la primera vez que vengas sea conmigo —sonríe. Y yo trato de hacerlo, y me sale una media sonrisa, más que nada un horrorosa mueca.

—Gracias, Yuu-chan —digo y él besa mi mejilla, cuando termina nos miramos fijamente; él está todo rojo y creo que yo también.

—Lo sien...

—No. Gracias —lo interrumpo y paso un brazo por sus hombros, lo medio abrazo—. En serio, gracias — le digo con sinceridad y sonrío.

Y comprendo que medio lo quiero.