Capitulo 23

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Capitulo 23

Una semana había pasado desde ese día. Una semana y ya me sentía parte de la familia de Justin.

Sus abuelos eran dos ángeles y hacían todo lo posible por complacernos. De hecho, algunas noches cuando nos quedábamos después de cenar hablando de cosas tribales, sacaban el tema del "matrimonio". Justin solía enfadarse por unos segundos, diciendo que no debían presionarnos que las cosas ya eran complicadas sin necesidad de agregar el tema del matrimonio. Yo, por mi parte, me ponía roja como un tomate e intentaba esconderme en mi ropa.

Por supuesto, estaba de acuerdo con Justin. Su familia y mi padre aceptaban nuestra relación pero para ojos de los demás, Justin, seguramente, era alguna clase de pedófilo ya que yo era menor de edad.

Sin mencionar el hecho que hacíamos todo lo posible para no demostrar mucho cariño en lugares públicos. Todos conocían a Justin y, si bien yo podía aparentar ser una chica de 18 o 19 años, no queríamos arriesgarnos. Nuestra relación era ilegal a los ojos de la ley y no quería poner a Justin en una situación comprometedora.

Si bien, él solía bromear sobre nuestra relación y afirmaba que iba a gritarlo a los cuatro vientos cuánto me amaba, yo sabía que en el fondo estaba aún más preocupado que yo.

Retomando el tema, su familia era adorable. Pattie era la clase de mujer que desearía tener como madre, sin mencionar el hecho de que nos parecíamos bastante en actitudes (lo que solía incomodar bastante a Justin).

-Cariño –susurró Justin en mi oído.

Solté un pequeño gruñido en respuesta. No quería despertar aún, había tenido la mejor noche de mi vida –sin sexo, cabe aclarar- y no quería que terminara. Si bien sabía que mi padre llegaría esa mañana, quería permanecer con Justin todo lo posible en su cama.

Anoche, cuando todos dormían, me había colado en su habitación y habíamos hablado por horas hasta que caí profundamente dormida en sus brazos, a mitad de la noche.

-Vamos, amor –susurró, riendo-. No te hagas la dormida. Tu padre llegará en cualquier momento, y le prometimos que dormiríamos en habitaciones separadas.

Gruñí nuevamente, provocando que Justin riera.

-No me obligues a llevarte a la ducha.

-¡Estoy despierta! –exclamé, mientras abría mis ojos.

Justin comenzó a reír y, por ende, yo también lo hice.

Dos días atrás, Justin me había pedido que fuéramos a la casa de unos de sus amigos a almorzar. Dado que nos habíamos acostado cerca del amanecer, yo estaba muerta de sueño y no quería despertarme. Después de que él me rogara por al menos diez minutos que me levantara, y yo me rehusara con todas mis fuerzas; me había tomado en brazos y me había llevado a la ducha, donde abrió el agua fría... obligando a que me despertara.

-Vamos, Destiny-dijo, intentando no reír más-. Ya es tarde. Tienes que ducharte, cambiarte e ir a desayunar antes de que llegue tu padre. Seguramente no querrá saber que duermes hasta tarde cuando estás de visita en casa de mis abuelos.

-¡Deja de chantajearme, Bieber! –le advertí, señalándolo con el dedo.

Justin me miró por unos segundos, divertido y luego metió mi dedo en su boca. Blanqueé los ojos y quité mi dedo de su boca, remplazándolo por mis labios.

-Buen día, amor...

Me retiré de la habitación con una gran sonrisa en el rostro. Caminé hacia mi habitación, que no se encontraba muy lejos de la de Justin, intentando desperezarme y no caer dormida a mitad del pasillo. Realmente deseaba poder quedarme en la cama con Justin, no necesitaba tener relaciones con él para poder ser feliz. De hecho, hasta el momento no habíamos hecho más que besarnos y acariciarnos.

Say No More |Justin Bieber| |Terminada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora