Historia del videojuego THE LAST OF US

Capitulo 2

  IMAGEN: ROBERT  

Tess abrió por completo la puerta y avanzaron. Había hombres en todas partes, sólo vigilaban, eran miradas desconfiadas.

– Hey, Tess. Hey, Tess – Le habló uno que estaba apoyado en una pared. – Hey, señorita. ¿Cómo está hoy? Oí que tienen algunas mercancías.

– Ahora no, Terrense.   – Lo cortó Tess.

– No, no, no, está bien. Tengo la tarjeta.

– ¡Ahora... No! ¿Me oyes?

– Bien... Puedo hacerlo. No hay por qué enojarse por eso.

Había perros encerrados y en cuanto los vieron comenzaron a ladrar. El lugar era una especie de mercado. Joel lo atravezó y las personas lo miraban feo.

-Lo tocas lo compras - le dijo un hombre parándose de una silla. Pero Joel lo ignoró y siguió adelante.

- Tess, ha pasado tiempo. Nos has dejado de visitar - le dijo un tipo.

-¿Quién rayos es ese?

- Nadie de tu incumbencia.

   Entró a una especie de vagón de metro oxidado. Al lado había una pelea, por lo que no podía oír bien. Iba pasando, pero un sujeto que usaba una gorra se levantó y le detuvo el paso.

-¿Dónde crees que vas?

- Malick. Siéntate de nuevo - le dijo Tess que venía más atrás.

- Oh, lo siento, Tess. No noté que venían juntos. Adelante - el tipo se quitó del camino y lo dejó pasar.

-¿Quién es ese?

-Un dolor de cabeza. No preguntes.

   Del otro lado vieron a un hombre de color con una capucha puesta. Tess se acercó y Joel la siguió.

- Busco a Robert - le dijo enseñando una tarjeta - ¿Pasó por aquí?

-Hace media hora. Regresó al muelle. Está allí ahora - tomó la tarjeta y la guardó.

   Pasaron por un callejón hasta llegar a un área donde habían tres sujetos con intenciones nada buenas.

-Ahj... Aquí vamos - dijo Joel. Se acercaron hasta quedar frente a ellos.

- Déjennos pasar - dijo Tess.

- Ustedes tienen que dar media vuelta y regresar si saben lo que les conviene - dijo uno de ellos.

-No tenemos asuntos con ustedes. Sólo queremos a Robert. No queremos hacer esto.

- Den la vuelta y lárguense ahora.

- No me iré a ninguna parte sin Robert.

- Perra, te partiré el cráneo a menos que te marches y saques a éste papanatas de aquí. - Tess se cabreó.

- Al diablo. - Tess sacó su pistola y le reventó la cabeza de un disparo.

-¡Cúbrete! - Gritó otro de los hombre, los cuales habían corrido a esconderse tras unos grandes tubos apilados, al igual que Tess y Joel, pero del otro lado del lugar.

-¿Listo? - preguntó Tess.

- Sí

-¡Los voy a matar malditos!

-Te cubriré. Ponlos en la mira.

-¡Estás muerto idiota!

   El truco estaba en disparar y cubrirse cuando ellos dispararan. En unos cuantos tiros ya los habían acabado.