Evan en multimedia.
Quería sacare celos a Lucas, pero no funcionaría. ¿Por qué él sentiría celos de mí?
Salimos de la casa y todos estaban en el mar, divirtiéndose.
Evan se saco el polo y se fue corriendo hacia donde estaban todos.
—Linda espalda, ¿no? —dijo Lucas detrás de mí.
Hermosa espalda, perfecta espalda...
—Hermosa... —dije.
—Tomale una fotografía, así dura más.
Lo ignoré y fui hasta la casa.
—¿A dónde vas? —gritó Evan.
—¡Traeré bloqueador! —grité.
En realidad quería cambiarme de bikini, pero me gustaba como me queda éste.
Subí hasta la habitación y empecé a busacar el bloqueador.
Quería ignorar a Lucas. Tengo que hacerlo, por mí.
Ya sé que es un poco infantil pero no me importa, voy a ignorarlo.
Bajé y me dirigí hacia donde estaba todos. Ya no se encontraban en el mar, si no en en la arena.
—¿Fuiste a fabricar el bloqueador o qué? —bromeo Evan.
Reímos.
Me senté encima de una toalla.
—¿Por qué no te quitas la ropa? —me preguntó Evan.
—¿Para qué?
-—¿Para que te metas al agua?
¿En serio? El clima no estaba muy caluroso hoy, de ninguna manera me metería.
—Oh, no. No me meteré —sonreí.
—Y ¿por qué tragiste el bloqueador? —preguntó Lucas.
¡Joder, quiero ignorarte! ¿Por qué me hablas?
—No lo sé —dije cortante.
—Alguien no se levanto se buen humor... —dijo Violet, la miré mal.
—Y... ¿no te meterás? —preguntó de nuevo Evan.
—No.
—¿Por qué? —dijo alzando una ceja. Me hubiera reído, pero él no es Lucas, de ninguna manera lo era.
—Joder, ¿tardas en entender o qué? —bromee y todos rieron.
Evan hizo algo brusco haciendo que termine cargándome.
—¡¿Qué haces, idiota?! —grité.
—Llevarte al mar —dijo sonriendo.
—¡¿QUÉ?! ¡¿PARA QUÉ?! —grité.
—¿Tardas en entender o qué?
—¡No me atacaras con mi propia espada!
—¿Con tu qué? Nena, deja de leer libros raro.
Ya sentía el agua en mis pies. Mierda.
—Evan, por favor, por favor no me sueltes.
Evan se estaba yendo muy al fondo. ¡Ya estábamos muy al fondo!
Me soltó.
Agunté la respiración y salí a la superficie. Evan hundió mi cabeza haciendo que me ahogue. Volví a salir a la superficie.
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Brown's
Teen FictionCompartimos el mismo cumpleaños, la misma música, el mismo apellido... Yo sentía que él era mi alma gemela. Definitivamente creo que él es el chico perfecto para mí.