The Assistant [Yoongi] (En Re-edición)

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NARRA JUNGKOOK

No puedo parar de morder mis uñas en este momento. Seon Jin está siendo atendida justo ahora y no puedo evitar sentirme preocupado por ella. El simple hecho de que lo nuestro se haya terminado no significa que no estaría aquí cuando me necesitara, recuerdo ver su rostro y no era el mejor en ese momento, lucía pálida y al parecer algo anda mal con su salud.

Solo ruego, que ella se encuentre bien...

—¿Familiares de Kim Seon Jin?— salió una enfermera del consultorio, me puse de pie ante su llamado —Yo estoy a cargo— alcé mi mano caminando hacia ella. La enfermera me dejó pasar dentro del consultorio, en este se encontraba el doctor hablando con ella para darle ciertas indicaciones conforme a su tratamiento. Su sonrisa se iluminó al verme y me hizo sentir tranquilidad en el momento de saber que se encuentra bien aunque eso no decretaba el fin de mi preocupación —¿Estás mejor?— pregunté y ella un poco cansada y somnolienta hizo un ademán de afirmación

—¿Jungkook, cierto? — preguntó el doctor y asentí —¿Podemos hablar un momento afuera? — preguntó mientras abandonaba el consultorio conmigo siguiéndole su paso. Ambos caminamos hasta un corredor cercano que se encontraba poco concurrido para poder conversar —Descuida, ella se encuentra bien— de alguna forma sus palabras me trajeron tranquilidad inmediata y me permitieron respirar con facilidad esta vez

Gracias al cielo y no fue nada malo, me alegro mucho

—Muchas gracias— ofrecí una reverencia al doctor —Le agradezco, la llevaré a casa ahora para que pueda descansar— le sonreí para darme la vuelta y regresar con Seon Jin —Excelente, asegúrese de que tome a tiempo sus medicamentos prenatales— me frenó en seco esas palabras que salieron de la boca del doctor y me giré confundido —¿Prenatales?— arrugué las cejas ante su comentario y el poco despreocupado asintió —Sí, ya sabe el acido fólico y suplementos, pronto tendrá su primer control de su embarazo así que todo debe estar en orden— abrí mis ojos al escuchar semejante frase.

¡¿Cómo que está embarazada?!

—Tiene que ser un error doctor, ella no está embarazada— mis labios temblaron un poco al decirlo —Claro que lo está, tiene dos meses de embarazo— y esas palabras fueron las que acabaron conmigo en tan solo unos segundos —¡¿DOS MESES?!— grité

—¡¿Dónde está Seon Jin?! — una persona habló a nuestras espaldas, me giré encontrándome con el rostro preocupado de Yoongi y podría jurar que mi sangre comenzó a hervirse por dentro con tan solo verlo así que no pude contenerme y corrí tras él tomándolo del cuello de su camisa —¡Eres un imbécil! — grité —¡¿Cómo pudiste hacerle esto?!

—Ya escuchaste al doctor Jungkook, así que apártate— me empujó bruscamente y de nuevo tomé con fuerza de su camisa —¡Caballeros este es un hospital por favor!

—¡Suéltame!— gritó —Ya escuchaste al doctor que Seon Jin está embarazada y esto no le hará bien a ella y nuestro bebé— mi respiración comenzó a sentirse más y más pesada, realmente lo está y eso significa que la he perdido para siempre. Solté su cuello abruptamente dándome por vencido al pensarlo de esa manera

NARRA YOON GI

—¿Ambos se encuentran bien?— pregunté al doctor quién antes de darme una respuesta miró a Jungkook primero —¿Tú eres el padre del bebé?— arqueó una ceja confundido y yo asentí, el doctor sacudió un poco su cabeza tratando de entender la situación que nos involucraba a Jungkook y a mi —Como sea, solo se fue un bajón de presión arterial. Lo mejor será que la lleve a casa a descansar y no ponerla en situaciones como estas

—Claro, no se preocupe— di las gracias y luego corrí hasta la habitación de Seon Jin —¡Espera!— gritó Jungkook a lo lejos y volteé —¿Qué quieres ahora?— me giré molesto al saber que seguiría con sus berrinches —¿S-seon Jin, lo sabe?— preguntó con su rostro cabizbajo lo cual fue como un recordatorio para mi haciéndome entender que en algún momento tendré que decírselo —No... ella aún no lo sabe— la seriedad al decirlo hizo que Jungkook se mantuviera pensativo ante esto —Lo sabía, de haber sido lo contrario, me lo hubiera dicho desde que el dolor comenzó— dijo