Te Mentí, Cierto.

Carta 5

"Y mientras escribo esto, te veo con ella. Sentados en la cafetería, sonriendo. Me alegro de que seas feliz, de verdad. Sólo que... Se me hace extraño. Yo, aquí; tratando de olvidarte... Y tú estás con ella. Siempre he sabido lo de vuestra gran amistad, pero... Sé que no tengo derecho a ponerme celosa, solamente me molesta ver que ella hace ahora contigo todo lo que hacíamos nosotros. Creía que... Creía que sería la única. No sé, lo siento por hacerme ilusiones tontamente. Espero que ella, al menos, te haga feliz. Ya que yo no pude. Ya que yo no quise... Ahora querría, pero es demasiado tarde. No merezco más oportunidades. Se ha acabado este juego. Así es como se pierde a la persona que más he amado. Al que entregué cada pedacito de mi piel, con tal de que la hiciera suya. Ya no voy a jugar más contigo, cariño. Tenías razón... Los humanos sólo servimos para hacer daño. Y me alimenté de tu dolor, para mantenerme a tu lado. Pero ya se ha terminado. Gracias por cuidar tanto de mí, durante estos años... Gracias por cuidar tan bien de mi pequeño corazón, que sigue siendo tuyo; aunque tú ya no lo vayas a saber más... Quiero desearte todo lo que yo no pude darte. Felicidad, amor y un futuro... Infinito. Sé que serás capaz de reponerte, y buscar a otra. Si es que aún no lo has hecho... Quiero que te levantes, porque yo sólo era una pequeña piedra en tu camino. Y que me demuestres lo bien que se te da pasear por él, porque es tu vida. Con la cabeza en alto, olvidando a todas aquellas personas que te hicimos daño. Tú encontrarás algo mejor. Es fácil.

Sólo quiero que me prometas algo: que vas a ser feliz. Tal y como lo eras conmigo, en su día. Quiero que sonrías, porque todos merecemos ver esa sonrisa capaz de despejar hasta la más turbia de las tormentas. Sé que tú puedes conseguirlo, como siempre lo has hecho. Sólo tienes que esforzarte por mirar hacia el frente, y no hacia el pasado. Yo me encargaré de mostrar, mediante unas simples cartas, cada uno de tus pasos hacia la vida que realmente mereces. Porque confío en ti, y sé que lo vas a lograr. Te doy fuerzas, desde aquí. Ya verás cómo cada una de las personas que te han herido caen a tus pies, cuando te vean caminar hacia el frente. Sin importarte nada. Es el momento de que demuestres al mundo lo mucho que brillas, en noches como éstas, que hasta la luna de ve borrosa; por las nubes... Y ahora, sigue con el café. Mañana a la mañana, tendrás que madrugar, y pillar el tren. Pensar en tu propio rumbo, y olvidarte a ratitos de mí. Hasta que sólo ocupe una pequeña porción de tu memoria; la de tus errores... No soy pesimista, mi amor... Sólo quiero aceptar por mí misma que te he perdido, y ésta es la manera en la que mejor lo haré; la más eficaz. Espero que aunque ella no sea yo, te haga sonreír. Porque es la única razón por la que me levanto cada mañana desde el primer día desde que te conocí... Tu sonrisa.

P.D. Mañana nos vemos, en la siguiente carta... xxx."