Te Mentí, Cierto.

Carta 58

"Nuestro amor está huyendo. De los recuerdos, de nuestra propia creación. Está escapándose de tu sonrisa, por miedo a volver a caer. Y por tu parte, trata de evitarme. Se va, se va de la ciudad. Al rincón de las cosas que nunca olvidaré. Nuestro amor vuela. Porque le hicimos creer que podría ser libre, sin ningún tipo de condición. Así que, aléjate. Olvida el daño que te hemos causado, y corre. Atraviesa océanos, en forma de historia. Visita todas las camas del país, siendo la historia favorita de todos los niños. Diles que fue. Que no es algo que alguien haya inventado. Que hubo amor, antes del olvido. Tú sabes que es así. Así que, no sufras por nosotros. Si nos ves caer, no regreses para que creamos que el otro nos ayudará. Haznos ver que no hay nada que hacer, que es mejor alejar todo lo que era. Y déjanos crecer. Permítenos recordarnos, de vez en cuando. Pasa por alto que se me escape una sonrisa cuando oiga hablar de él. Trata de tampoco perseguirlo, que sé que siempre fue tu favorito (y el mío...). Si lo ves hundirse, recuerda que él sabe levantarse mejor que nadie. Y no llores. Porque las historias más bonitas, son las que tienen un final incierto. Las que son capaces de hacerte soñar; pensar que las cosas cambiarán, aunque esto no ocurra.

P.D. He cambiado un poco el destinatario de esta carta, espero que me lo perdones..."