Carta 125

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"Ay, rosa marchita. Hoy lloro la muerte de uno de mis mejores amores. Me prometieron que serían todo corazones, pero ya sólo quedan ruinas. Y no es felicidad lo que derrochan estas minas. Sólo el rastro, de un trasto; con nombre y apellidos, y usado tantas veces, que pierde los sentidos. Su mirada ya no sabe a miel, ni sus palabras me hacen enloquecer. ¿Será verdad que este sentimiento ha cesado?, en realidad, no quiero olvidar todo lo que me ha enseñado. Tendría que levantarme de nuevo, y proseguir caminando, pero ya no me quedan ganas. Es por eso que sigo esparándote en el suelo, porque sé que algún día -inevitablemente- volverás a caer. Y aunque no sea por mí, yo seguiré aquí.

P.D. Tus labios de cereza, me hacen perder la cabeza."

Te Mentí, Cierto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora