Te Mentí, Cierto.

Carta 32

"Que sepas que tenías razón, que no valía la pena. ¿Por qué iba a darlo todo por alguien que ni siquiera me supo querer, en ningún instante? Que no. Que yo no era la princesa de ningún cuento de hadas, porque fue una pesadilla. Pero sé quién soy, y sé que tengo un futuro por delante. Sé que encontraré a alguien que me sepa valorar como tú no lo hiciste en su día, y que será con quien pase el resto de mis días; aunque siga soñando con pasarlos contigo... Y que puede que en el fondo,todo tenga sentido. Porque creo que he aprendido la lección. Que no hay que caer por quien te tiró, y que mi único futuro lo decido yo. Lo peor es que te amé como si realmente fueras el amor de mi vida, y así es como conseguí desgastar los restos de corazón que me quedaban. Pero ahora los tienes tú, y tampoco pretendo buscarles otro dueño. Te amo. Por favor, no lo hagas. Por favor, no te destroces. No... No quiero, de verdad. Yo te quiero. No sé por qué trato de autoconvencerme de que no es así. Si tú te vas, la vida no tendrá sentido. No lo hagas, cariño... No quiero ver las estrellas si ya no nos cubre a los dos el mismo cielo, ni quiero volver a salir a la calle si no compartimos un sol idéntico. Por favor, no...

P.D. Eres lo que más he querido, no lo hagas... No te rompas, por favor..."