No sabía que carajo golpear, así que puse una canción de Rock -Welcome to the Jungle, específicamente- y empecé a cantar como una loca y a golpear el volante del auto.
Llegué a mi casa hecha una furia. Dejé las cosas sobre la mesa y subí rápido a mi habitación.
Pero nadie puede dejar de molestarme el día de hoy, por eso subió mi madre gritando. Tampoco tiré tan fuerte las cosas sobre la mesa. Bueno solo un poquis.
-¡CASI DESFONDAS MI MESA PREFERIDA! ¡TÚ ME COMPRABAS UNA NUEVA SI LA ROMPÍAS! ¡¿QUIERES QUE MI MESA QUEDE COMO UNA DONA?! ¡PORQUE ESTUVISTE A PUNTO DE LOGRARLO!- y esa es mi madre tan "normal" como siempre.
-¿¡POR QUÉ NO SOLO PREGUNTAS QUE ES LO QUE ME PASA!?
-Cierto, cierto. -abre la puerta y se sienta en mi cama, toma mi peluche Monito, que es un tigre, si, era media idiota de niña. - Cuéntame. ¿A quién tenemos que golpear?
Apenas dijo eso la miré mal.
-Okey, okey, ¿que te hicieron?
-Unas ancianas... fue así: el día que sus agentes me llevaron, en la tienda, había una anciana, que era la encargada de la sección de vestidos, parecía adorable, pero luego de quitarme la idea de que era adorable y de fijarme en que necesitaba un vestido decidí chantajearla, pero, digamos que el vestido era más caro que mi soborno, y dadas las circunstancias tuve que atarla y meterla en un probador. Y cuando iba al super una anciana idéntica a la de la tienda se tiró a mi como si fuera su turno, resulta que era hermana de la de la tienda, logré cerrarle la boca. -puse una mirada de superioridad y mi madre me chocó los cinco- luego, cuando llegué al super me encontré con otra, esta me hizo tropezar y yo tiré de su bastón y ella se tiró.. ¡RESULTA QUE SON TRILLIZAS! ¡Y LAS TRES TIENEN ALGO CONTRA MI, CONTRA TI, Y CONTRA TODOS NOSOTROS!- me alteré otra vez.
Mi mamá se frotó la cara con sus manos tres veces, soltó un gruñido y por fin dijo: Conozco a las malditas. Y no son ancianas, son tres mujeres de mi edad que pasan desapercibidas de la gente que las busca disfrazadas de ancianas. Les dicen las "trillizas del engaño" porque lograron evadirnos mas de 30 veces. Al final siempre las descubríamos pero cuando lo hacíamos era tarde, ya habían cambiado de personalidad. Son muy peligrosas, si te encuentras con una debes llamarnos a papá o a mi o si ves a Nora llámala. Pero jamás te quedes sola con ellas. Nunca.
-¿Pero que tienen contra ti?-
-No es solo contra mi, sino también con Nora. Es que, una vez, hace mucho, Nora y yo trabajabamos juntas y las trillizas eran nuestras compañeras en algunas ocasiones, en la mayoría mejor dicho. Bueno, la cuestión es que un día quisieron hackear la base de datos de la agencia y así ser ellas las que tienen todo el poder, haciendo un ligero cambio de datos en el que se explicaba que los jefes habían renunciado por motivos perosnales y las habían puesto a ellas a cargo de toda la agencia. Luego de cambiar los datos amenazarian a los jefes. Ellas nos pidieron ayuda y nosotras negamos, así que contactamos con los jefes y mandamos a otros agentes incluídas nosotras para detenerlas. Estuvieron presas por quince años. Nora cambió de agencia por l hecho de que le daban los peores recuerdos de ellas, ya que las queríamos mucho, y yo pues, me quedé ahí porque uno de los agentes que mandaron era tu padre y me enamoré así que.. Esa es la historia.
-¿Porque todos tus cercanos tienen la necesidad de hackear algo para tener ellos el poder?
-Porque son unos idiotas que no saben que otra cosa hacer- se levantó de mi cama, aún con Monito en mano. -Iré a cocinar.
Me senté en mi escritorio y saqué mi notebook. La prendí y entré a Google. En él busqué "Las trillizas del engaño"
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La vida de una chica espía.
Teen FictionAshley es una chica de 17 años que va a cuarto de secundaria. Junto con su hermana Barbara robaban algunos vestidos en algunos locales en donde, claramente, no podían pagarlos. Pero ella no sabía que Barbara todo esto se lo informaba a sus padres, y...