La vida de una chica espía.

23. Un día muy agitado.

Con ustedes, damas y damos, caballeros y caballeras el (3/3) narrado por el sensualón de Dylan O'brien.

RYAN POV'S:

Después de que sonara el timbre que finalizaba el receso pude ver como mi hermano y la amiga de Ashley se alejaban de ella dejándola sola en el árbol, al cual se subió un momento después.

¿Que es lo que está pasando aquí? Eso no lo se. Pero lo que si se, es que voy a tener la oportunidad de dos cosas: Saltarme la clase de Historia y quedarme un rato con Ashley♥

-¡Hey! ¡Mini-Smith!-. le grité corriendo hasta ella y agitando la mano, ella hacia como que no me veía e intentaba esconderse mas pero era inútil. -¿De quién te escondes?

-Estoy en una misión secreta.

-¡Oh! ¡Entonces te ayudo!-. le guiñé un ojo y ella me desaprobó con la mirada.

-No, es cosa mía. Mejor ve a tu clase o te van a castigar.

-Castígame tu, Ash-ash-. hice que sonara lo más pervertido posible.

-¡No por Dios! ¡No empieces otra vez con eso! No tuve paz en todo el día esa vez!

Solté una carcajada y me propuse a subir al árbol, verla a ella me hizo parecer que era fácil. Pero creo que es más fácil escalar una montaña que este árbol. 

-¿Como hiciste para subir tan fácilmente? ¿Te dedicas a escalar árboles en tu tiempo libre?

Extendió las manos hacia mi y me tomó de los brazo, me levantó como pudo hasta ella y pude subir.

-Si te hubieras impulsado con más fuerza y tus movimientos hubieran sido más rápidos habrías subido enseguida.

-¿Quién dice que eso funcione?

-La ciencia y yo decimos eso.

-Entonces si tu lo dices no tendré más remedio que creerte-. volví a guiñarle el ojo, ella me miró ladeando la cabeza y dijo:

-¿Tienes algún tic en ese ojo? Porque no dejas de guiñarlo y eso me incomoda.

-Entonces dejaré de hacerlo.. Y entonces, ¿qué hacías aquí?

-Estoy intentando averiguar algo.

Me contó la historia de lo que había sucedido y me empecé a reir.

-¿De qué te ríes, tonto?

-De que hagas todo esto solo porque tacharon sus nombres.

-Oye, lo que hicieron es una ofensa para su alteza, o sea yo-. esta vez fue ella la que guiñó el ojo.

-Creo que se me cayeron los calzones.

-Cállate, idiota-. se empezó a reír y luego quedó seria mirando a la entrada. -Mira, allá vienen, escóndete mejor.

-Si yo pude verte seguro que ellos podrán.

-Pero tu ya sabías con antelación de que estaba aquí, ellos no-. sonrió maliciosa.

Esperamos hasta que tres chicos llegaran hasta aquí. Eran los tres que tacharon el nombre de los chicos.

Ashley antes de subirse había tachado sus nombre y con su navaja suiza -que por cierto no se porque tiene consigo una navaja suiza- clavó en el árbol una nota en la que se burlaba de ellos.

-¡Qué perra! 

-¿Saben que Ashley es?

-Creo que es la de cuarto.

-Ay Dios Santo, estamos perdidos, mejor dejemos esto como está y nos vamos antes de que nos vea.

-La verdad es que si, están bastante perdidos, ton-tos-. Ashley se paró  en la rama para bajar pero ésta se quebró y cayó junto con Ash, la cual atravesó varias ramas más y cuando cayó cerca de los chicos uno le rozó la navaja por la nariz provocando que se hiciera una cortadita... como las demás que tenía en el cuerpo.