Atentamente, Jared. [EDITANDO]

Capítulo 14.

Desperté con los brazos rodeando el cuerpo de Samira.
Me removí pero ella no lo notó, seguía durmiendo.
Antes de levantarme a desayunar algo, me quedé mirándola.
Tenia el maquillaje por toda la cara, el pelo revuelto y unas ojeras enormes.
Pero aún así seguía siendo preciosa.
Me levanté despacio para no despertala, y fui al cuarto de Briana. Ella ya estaba despierta, jugaba con su móvil.

—Briana... ¿Dónde están mamá y papá? —le pregunté.

—Llamaron para decir que volverían esta tarde, no me dijeron donde iban, estarán en un hotel...

—¿Por qué no me dijiste nada? —la interrumpí.

—No quise molestaros.

Me reí y la destapé.

—¿Y a que hora volviste? —le dije queriendo parecer enfadado.

—Pues una hora después de que te fueses, pero ya estabas dormido. Bueno, dormido... Quién sabe.

—No seas estúpida.

Bajé a la cocina a hacerme algo de desayunar y me pregunté ¿que le gustará a Samira?
Puse un par de palmeras de chocolate en una bandeja, con un vaso de zumo, un cola cao y una manzana.
Subí las escaleras con cuidado de no caerme, y abrí la puerta sin llamar.
Samira estaba de pie aún con la camiseta que le dejé la noche anterior.

—Te he traído algo para desayunar... Como no sabía lo que te gustaba, te he traído de todo un poco.

—Gracias Jared... Eres adorable.

Cogió la bandeja y se sentó en mi cama a comer, yo solo la observé comiendo cómo si llevará días sin hacerlo.
Me dio la bandeja y se levantó.

—Jared... Creo que debo irme.

—¿Ya? ¿Por qué? —Después de lo que había hecho por ella aquella noche, estaba actuando muy raro.

—Me acaba de llegar un mensaje...

—¿Qué mensaje?

—Nada importante. Toma. —Se quitó mi camiseta y me la dió y salió hacia el cuarto de Briana.

Miré su cuerpo y lo que me imaginaba, era perfecto. Salió del cuarto.
¿Pero que he hecho ahora?
Por suerte había dejado su móvil encima de mi cama. Iba a mirar el mensaje, pero no estaba seguro.
Aunque por otro lado, no me había contado lo que era, y si tenía que ver conmigo, yo tenía que saberlo.
Agarré el móvil y abrí el WhatsApp.

3 Conversaciones.

Mamá : Hija ¿Cómo estás? Tenemos tantas ganas de verte...

Maddy : ¿Dónde te has metido?

Rosalie : No me importa Rosalie...

Abrí la última conversación, no sé, pero algo me dijo que la abriera.
Se me cayó el mundo al leerlo.

Rosalie: ¿Quieres que te cuente algo?

Ssmira: Qué pasa ahora, Rosalie.

Rosalie: No te ofendas eh..

Samira : ¿Qué quieres?

Rosalie: Jared sigue siendo perfecto en la cama, no parece que haya olvidado eso.

Samira: ¿Qué?

Rosalie: Si, la semana pasada pasó conmigo la noche. Tres veces, sigue siendo... Wow.

Samira: No me importa, Rosalie...

Madre mía. Me había dado cuenta de que esta tía era una cerda. Esto era lo que ella quería. De pronto entró Samira con ropa de Briana, por eso me dio la camiseta... Solté el móvil rápido, pero se dió cuenta de que lo había estado mirando.

—¿Que haces con mi móvil Jared? —me dijo con cara de pena y los ojos rojos. Parece que fue al cuarto de Briana a llorar.

—Samira, tiene una explicación.. —No quería que nadie supiera que había estado con esa guarra.

—No, no la tiene. Yo pensé que volveríamos a estar bien alguna vez pero no. Es imposible. Te sigue gustando ella...

—No me gusta Rosalie, por dios...

—Jared, lo siento. Lo siento por volver a hacerme ilusiones.

Me tocó el pecho y con el otro brazo me abrazó, mojandome la camiseta con una lágrima.

Flashback.

Hola Samira. Feliz Navidad antes que todo. Recuerdo la última navidad que pasaste a mi lado. Después de la fiesta fuimos a dormir y casi me matas porque intenté hacer algo raro contigo. Yo te repetía una y otra vez que te quería mía, pero tu me respondias que no estabas preparada. Al día siguiente me excusé diciendo que estaba borracho, que en parte era verdad. Nos lo pasamos realmente bien.
He hablado con esos amigos tuyos ¿Y sabes que estuvimos hablando?
Les pregunté que cómo podía volver a conquistarte, y me dijeron que te habías vuelto demasiado fuerte para volver a caer en mis manos.
¿Y sabes algo más? Que fueron las palabras que más me dolieron desde tu "Adios".

Atentamente, Jared.

Fin del Flashback.

(FOTO BRIANA)