Capítulo 36: La presentación

946 55 10
                                    

Narrás Vos:

21 de octubre de 2015, hoy es una de las fechas más importantes para mí, hoy nos presentábamos con mí banda en San Telmo, los nervios y la ansiedad fluían por mi cuerpo, casi no pude dormir en toda la noche. En este momento estábamos con la banda almorzando y hablando.

Diego: ¡Que ansiedad! -exclamó el pelilargo-

Pablo: Necesito tocar.

Vos: ¡Yo también! -exclamé-

Mati: Sí, ya quiero esta ahí -se sumó el baterista a la charla-

Rocío: ¿Quiénes vienen hoy a verlos? -preguntó la rubia-

Pablo: Mi mamá y mis hermanos -dijo con una sonrisa-

Mati: Unos amigos.

Vos: Mi papá, mi novio, Lali y por ahí Guido, Gastón y Patricio -tomé un poco de agua-

Rocío: ¿No era que venían seguro los Sardelli? -preguntó interesada-

Vos: Lo que pasó es que estuvieron recorriendo varias provincias, y ahora están volviendo, por ahí vienen y por ahí no. -le respondí a la rubia que estaba un poco desilusionada con mi respuesta-

Pablo: ¿Y Lali viene con el novio?

Vos: La verdad no sé -levanté mis hombros-

Diego: Que lástima que no sabemos si viene Pato, yo le quería preguntar algunas cosas sobre guitarra.

Vos: Bueno, yo dije que no sabía si venían o no, puede que vengan. -les sonreí-

Rocío: Ojalá -dijo cruzando sus dedos y todos reímos ante esa acción-

Vos: ¿Y vos rubia? ¿Quién viene a verte? -pregunté-

Rocío: Mis padres, mis hermanas y dos amigas -contestó-

Después de almorzar nos pusimos a ensayar, queríamos que todo salga perfecto, no podíamos, ni nos permitíamos tener una falla, de todos modos la más obsesiva del grupo, era yo, pobre mis compañeros los volví locos.

Vos: Paren -le dije a mis compañeros de banda que estaban tocando- tengo que bajarle un poco al volumen de mi guitarra -dije mientras iba a tocar el amplificador que correspondía a esta-

Pablo: Pero si se escucha re bien -opinó-

Vos: No, estaba un poco fuerte -dije volviendo a mi lugar, tocamos un pedazo de una de las canciones- Ven ahora suena mejor.

Rocío: Para mi suena igual -dijo la rubia-

Vos: No, ahora suena mejor -insistí-

Matías: Si, vos lo decís...-dijo mirándome-

Tocamos un poco más, cuando paramos de tocar, miré a mis compañeros.

Vos: Che, Ro, me parece que en los coros tendrías que cantar un poquito más fuerte así se pueden escuchar mejor y Diego, creo que hay que bajar apenas, la distorsión de tu guitarra. -opiné-

Diego: Puede que tengas razón pero... ¡Aflojá un poco mujer! -exclamó mi compañero-

Matías: Yo creo que Diego tiene razón, relajate un poco -apoyó a las palabras del guitarrista-

Vos: Perdón, es más fuerte que yo -contesté-

Seguimos ensayando un poco más y nos fuimos a nuestras casas a prepararnos. Cuando llegué, me encontré con papá en la puerta, estaba esperándome.

Vos: Hola Pa -le di un beso- ¿Hace mucho que me estás esperando?

Papá: No hija, hace...-dijo mirando su reloj- media hora.

Noches de abril (Pato y vos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora