Capítulo 62 | Él Me Necesita.

614 44 3
                                    


Pasó una semana del cumpleaños de José, todo regresó a la normalidad. Después de la escuela, limpié el departamento y regresé para colocar el mandado en la alacena. Cuando tocan la puerta, bajé de la pequeña escalera y grité.

-¡Está abierto, Yayo!.- Yayo entra.

-¿Cómo sabías que era yo?.- Pregunta.

- Conozco como tocas por eso.- guardando la última lata en la alacena.

-Entonces si un ladrón toca igual que yo ¿Lo dejarás entrar?.- Rodeé los ojos.

-Cállate Yayo, me alegra que hayas venido.- Dije entre risas.

Fui con él a darle un gran abrazo, siento las manos de Yayo aferradas a mi cuerpo, como nunca quisiera soltarme o al menos eso sentí.

-¿Cómo te ha ido con Pepe?.

-Bien, me agrada estar junto a él, hemos tenido un bonito inicio, fue a grabar con la banda hoy, creo que llegará hasta mañana...te he notado diferente.

-¿Yo? Por favor ____.

-¿Entonces por has estado distanciado? ¿Porqué no estuviste en el cumpleaños de Pepe?- Pregunté algo triste.

-Si estuve, hable con él, oye también necesito mi espacio.

-Te alejaste de mí también, siempre tienes un pretexto para no verme.- Yayo ya sabía que pretexto sacarle con tal de que no supiera la verdad.

-Sabes que a veces que me entra la soledad muy fuerte por eso me alejo tú sabes como soy.

-¿O estás celoso de que estoy con él? ¿Estás celoso?.- El enojo de Yayo se hizo notar.

-¡NO! Carajo, no estoy celoso sólo trato de protegerte, sabes que ambos son mis mejores amigos.

-¿Protegerme? ¿De qué Yayo?.

- Tú sabes de que, no quiero que vuelva a pasar.- Cruzando los brazos.

-Soy lo suficientemente grande, no tienes que cuidarme y sé a lo que te refieres.

-Pero me preocupas mucho.

-José no podría hacerme daño, Yayo y tú lo sabes, tal vez él tenga su carácter pero así es él.- Yayo me acerca a mi, poniendo sus manos en mi cadera.

- No quiero que esas cicatrices vuelvan.- Me mira a los ojos y me abraza.

Nos separamos,  caricia mi cara poco a poco va poniendo mis labios sobre los de él pero lo detengo.

-No puedo.- Mi teléfono suena, contesto y cuelgo rápido.

-¿Qué pasa?.- pregunta Yayo.

-José, tuvo un accidente.- dije dejando caer el teléfono.

-¿Qué?.- dice impactado Yayo, yo comienzo al alterarme un poco.

-Necesito ir al hospital, necesito verlo vamos.- dije presionándolo.

-¿Pero qué le pasó? ¿Porqué no me dices?.

-¡TUVO UN ACCIDENTE YAYO! ¡NECESITAMOS IR AL HOSPITAL AHORA! ¡JOSÉ ME NECESITA!.- Dije gritando y desesperada, Yayo me toma de los hombros.

-Tranquila, no puedo llevarte así, podría pasarnos algo, respira profundo, él estará bien, sólo piensa en eso.- Trataba de imaginar otra cosa pero no podía hacerlo.

Mi mente no me dejaba, sólo podía proyectar a él lastimado o algo peor, antes de que las lágrimas llegarán, di un enorme respiro abrí los ojos y noté a Yayo asustado por mi estado.

-Ya estoy bien, ¿Ya podemos irnos?.- él asienta la cabeza, salimos corriendo al carro manejando directo al hospital.

Espero que te haya gustado este capitulo no olvides darle favorito y comentar.

Contra Fuego | José Salazar. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora