Contra Fuego | José Salazar.

Capítulo 57 | Tatuajes.

-¡Puta madre!.- Grité, José tenía papel y yo piedra.

-Nunca podrás derrotarme, ahora a la silla PERO yo escojo el diseño.

-¿¡QUÉ!? AH NO, no dejaré que tu lo elijas, aunque sea tu novia tal vez me hagas que me tatúes tu rostro.

-Pero así me podrás ver todos los días, mi amor.- cruzó los brazos.

-Admite que siempre te gano en las apuestas. ____ arqueó una ceja.

-Traga tres kilos de mayonesa.- José se tapa los oídos.

-No menciones esa puta y horrorosa palabra.

-Bueno, me haré tu diseño pero también me haré algo que yo quiero.- José no se negó.

El tatuador terminó ambos diseños, primero empezó con José y a mi otro tatuador.

Miré a José nerviosa, él por su parte sentía una confianza que se proyectaba.

-Puedes tomar mi mano, si tienes miedo.- No dudé ningún tantito, mi mano sudaba, empezó con la primera línea, no fue tan dolorosa.

-¿Te duele?.

-Sólo cuando vuelve a pasar la aguja por el mismo lado ¿Cómo vas tu?.- José hizo un gesto algo gracioso.

-Ah, si puedo aguantar..LO.- Hace un gesto de dolor.

-Tranquilo, aquí estoy.- Sostengo su mano más fuerte, 2 horas después terminaron, me pido que me levantara y lo viera presentía algo verdaderamente malo hasta que miré al espejo.

-¡Oh por Dios! ¡Es bellísimo! me encantaron los colores, el diseño.- José eligió un venado en forma geométrica con algunas marcas de acuarelas al fondo y hojas realmente era precioso, el segundo tatuaje estaba en mi muñeca justo en una parte de lado un diminuto búho.

-¿Te gustó mi amor?.- Tomando mi cintura.

-Es un diseño precioso, te luciste.- le dí un beso en los labios.

-Es el logotipo de mi banda, quise que lo tuvieras.

-¿En serio? ¿Porqué me lo tatuaste?.

-Bueno le agregué lo demás para se viera genial, me gustó la primera vez que fuiste a verme de miles de personas que estaban ahí puede verte sólo a ti.- En ese momento no sabía como reaccionar porque era cierto.

-Combina con el mío.- Me muestra su antebrazo con la misma figura.

Salimos de la tienda con las vendas puestas, después de tanto viaje regresamos al hotel a tirarnos a la cama.

-Ten, esto te ayudará me lo pongo cuando me hago uno.- Me pasa un tubo al parecer era pomada.

-Gracias, ¿Siempre cargas con esto?.

-Nunca sabes cuando te harás uno, así que siempre llévala.- Me Guiña un ojo.

-Ahora lo tendré en cuenta.-José se acerca a mí, lentamente poniendo un pie en la cama como apoyo, sus manos tocando mi cara para darme un beso.

-Te amo preciosa.- Esta vez no le dí un golpecito, sólo me sonroje.

-Yo también mi amor, demasiado.- juntamos nuestras manos y nuestras caras.

-¿Me abrazas?.- Dije en un tono infantil, él me sonríe, me acorrala en sus largos brazos sin soltarme y besó mi cabeza.

31 de Diciembre.

Nos dormimos en la misma posición abri mis ojos sin moverme mucho mire como dormía se veía lindo fue irresistible no darle un pequeño beso en los labios.

-Buenos dias, pequeña.- "Pequeña" casi se me derrite el corazón cuando lo pronunció.

-Buenos días, feliz casi año nuevo.- Me quita el cabello del rostro.

-Tenemos que levantarnos, hay muchas que hacer hoy.- me acurruque en su pecho.

-Ño, hay que estar todo el día en la cama abrazaditos.- José rió.

-Anda, me bañaré.- Pepe se levanta de la cama traía puesta una camisa interior blanca y sus boxers.

-¿A qué horas vas por el pan?.- Mirando su "trasero" José me mira como un tonto, no sabia si reír o sonrojarse.

-Ay Dios mío amor, lo sé, tengo un tremendo culo.-Hizo un intento de baile extraño.

-¿Trasero? ¿Tienes eso?.- Me reí como una foca retrasada, hace una cara estupida y se mete al baño.

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