Capítulo 29

194 23 3
                                    

Pero no me lleva a casa.

Nos subimos en su moto y conduce hacía lo profundo del bosque, a unos quince minutos. Paramos en una pequeña casita de madera tipo cabaña de un piso. Frunzo el ceño. ¿En dónde estamos?

- Bienvenida a mi humilde morada - dice ayudándome a bajar

- ¿Esta es tu casa? - pregunto asombrada

- Así es

Me empuja hasta la amplia puerta, saca sus llaves y al abrir me deja entrar primero.

Veo todos detalles, por dentro también se ve de madera rústica, los sofás se ven cómodos y esponjosos en color café.

Es pequeña, ya que desde aquí puedo ver todo. Además de la sala, hay una mesa redonda para cuatro personas, y una cocina con pocos muebles.

Es acogedora.

- ¿Quieres algo de tomar?

- Agua está bien

Va hacia la cocina pero no sin antes hacerme señas para que me siente.

Me acomodo en el sofá cerca de la ventana, las vistas son preciosas aquí ya que estamos en un punto bastante alto.

- Aquí tienes - dice Adam tendiéndome un vaso

- Gracias

Se sienta a mi lado, me pasa un brazo por los hombros hasta quedar pegados y me da un breve beso en la mejilla.

Nos quedamos así por al menos media hora, yo medio acostada sobre él y Adam subiendo y bajando su pecho al compás de sus respiraciones.

Estos momentos son en los que me pregunto si Adam es bipolar. Ayer estaba chispeante y coqueto. Hoy me parece el hombre más tierno.

- Lamento lo que viste - dice rompiendo por fin el hielo

- Yo también

- Nathan es un tonto

- Lo sé, pero un tonto al que quiero – triste, pero cierto

- No te mereces lo que hizo

- Probablemente no, pero así fue

- Dime que no piensas perdonarlo - dice separándose un poco para verme de frente

- Técnicamente no estamos juntos - dolor en mis palabras

Adam mueve su cabeza de forma negativa pero no me dice nada, aunque puedo notar que está enojado.

Se levanta y va hacía el teléfono, marca algún número.

- Hola... Ella está aquí... Si... No.... Está bien

Cuando termina le cuestiono con la mirada para saber con quién estaba hablando.

- Llamé al tío Kevin, le pedí que me dejara ir a buscarte cuando saliste corriendo así que tenía que avisar que estás bien.

- Se preocupan mucho

- Eres una de nosotros ahora, tal vez no por completo genéticamente, pero si en esencia.

- Gracias

Nos quedamos viendo por infinitos momentos hasta que nos damos cuenta de lo intenso que es.

- Así que ya no están juntos - comenta apoyado en la pared y con los brazos cruzados

- Bueno, decidimos darnos un tiempo - me encojo de hombros

- Pensé que no iban a estar viviendo juntos pero seguían en una relación

Para quedarme (ÁPERANTI I) #PBMinds2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora