Bad Boy [KaiBaek]

10.- Drogas

 Al momento de despertarse, su cabeza daba vueltas y fue rápidamente al baño a vomitar. Las lágrimas podían asomarse en sus ojos por la fuerza de la comida saliendo por su garganta.

Podía recordar casi todo lo que había pasado la noche anterior, donde se dio cuenta que Kai lo único que hacía, era estar con cualquier persona que pudiera besar y/o acostarse.

Pero... aun así, Baekhyun no iba a dejar a Kai, era lo más genial que jamás nunca le había pasado, sentía la adrenalina al estar junto a él, amaba el sentimiento impredecible que expilaba el moreno, algo completamente excitante y estimulador para todos sus sentidos.

Iba a seguir con Kai, era la mejor y peor opción que tomaba.

-¿Mamá? –Preguntó su hijo por teléfono.

-Hijo, ¿Cómo amaneciste? – Preguntó su madre, Baek omitió todo lo que había hecho anteriormente y como su madre no llegó a dormir ese día, no sabía que el castaño fue a una fiesta.

-Bien... -Dijo, un poco culpable por mentirle a su madre. Se dirigió a la cocina a llenarse un vaso de agua y comenzar a buscar una pastilla para la resaca –Y... Tu... ¿Dónde estás?

-Ya sabes Baek, te lo he dicho. –Dijo su madre, al castaño le estaba doliendo un poco más la cabeza por la imagen mental de su madre con otro nombre, pero trato de olvidarla al tomar la pastilla con un sorbo de agua –Bueno bebé, me tengo que ir, seguramente estaré ahí para almorzar, nos vemos. –Y así termino toda su conversación, su madre estaba cada vez más distante, pero cuando la veía, podía notar un pequeño brillo en sus ojos, algo así como una felicidad.

Al llegar el lunes, Baek no vio a Kai, y tampoco quería verlo, no podía, sentía como la impotencia crecía con cada flashback del moreno con esa puta.

-Baek, Baek, BAEK! –Gritó Jongdae para sacarlo de su trance. –Estas bastante distraído –Dijo con una sonrisa en su rostro, el castaño se lo devolvió y bajo la mirada avergonzado por los pensamientos que tenía.

Al llegar al casino y comenzar a comer, Jongdae se sentó a su lado, Suhoal otro, Lay al frente y al lado de él, Kyungsoo.

-Has estado desaparecido Baek –Comenzó Lay –Cuando te llamamos nunca respondes –Terminó con un puchero.

-Si... bueno... -Murmuró el castaño, forzando una sonrisa, mordiéndose el labio y tocándose la nuca, solamente para poder imaginarse una buena mentira, aunque no quería decirlo. –He... he estado un poco ocupado, con... con lo del tra...trabajo y... todo eso –Dijo, no era una total mentira, aunque Kai era probablemente casi todas las desviadas de encontrarse con sus amigos.

-Pero... -Siguió Jongdae –Ven el viernes con nosotros –Propuso – Vamos a salir. ¿Vienes, cierto Baek? –Preguntó con una ceja alzada, esperando una positiva del castaño.

-Bueno... Yo – Murmuró –De acuerdo, sí.

Al seguir comiendo y hablando, pudo notar como Luhan abría la puerta de la cafetería, entrando junto a Kai, que estaba detrás de él, hablando por celular.

Al ver al moreno, Baek bajó la mirada violentamente, sintiendo como sus mejillas se encendían por diferentes sentimientos, pensamientos, y recuerdos con Kai. A pesar de que llevaban conociéndose hace poco, podía sentir como el pálido muchacho ocupaba un lugar cada vez más grande en su cabeza y... en su corazón.

Cuando por fin llegaba el día viernes, Baek estaba un poco más emocionado de lo normal, ya que iba a estar en la misma clase de Kai, y además... su cabeza daba vueltas al recordar lo que había sentido esa noche que lo vio con una mujer, sentía... demasiados... celos.