Guerra de Consejeros

Capítulo 8

Kyle estaba prácticamente lanzándome dagas con sus ojos. Si las miradas mataran, esta sería la que me dejaría siete pies bajo tierra. Yo solo lo miré con una sonrisa de victoria. Hizo una mueca de asco y luego su rostro se llenó de ira. Sonreí aún más ante eso.

—¿Por qué diablos hiciste eso? —preguntó transmitiendo su enojo en cada palabra. Me agradaba verlo tan enojado alguna vez en su vida.

—Porque eres un imbécil arrogante y no te soporto —dije aún sonriendo. Esta sonrisa no se iría de mi cara en mucho tiempo. Kyle hizo un ruido entre una risa amargada y un bufido.

Luego me miró y, sin que mi mente procesara lo que él estaba a punto de hacer, tomó un vaso lleno de agua y me lanzó el contenido del vaso. Sentí como el agua chocaba con mi ropa y mis piernas expuestas y como un escalofrío me recorría por lo fría que estaba el agua. Apreté mi mandíbula muy fuerte y sentí como la sonrisa sí desapareció de mi rostro.

—Te odio, Williams —escupí entre dientes. Él sonrió.

—El sentimiento es mutuo —dijo.

—Tendrás tu venganza —le advertí con un dedo en alto mientras me alejaba de él para salir de la cocina a cambiarme.

—Esperaré ansioso —gritó a mis espaldas cuando cerré la puerta fuertemente atrás mío. Resoplé. Este chico enserio era insoportable.

•••

—¿Qué te pasó? —preguntó Julie cuando me vio entrar por la puerta de la cabaña en donde dormíamos nosotras con algunas otras chicas. La miré. Estaba sentada en la cama arriba de la mía. Cuando habíamos llegado, ella había tomado la cama de arriba y yo me tuve que conformar con la de abajo.

Recordé lo que acababa de pasar y bufé enojada. Ella miró mi ropa y mis piernas mojadas—. ¿Te caíste al lago?

Frunció el ceño y yo busqué ropa seca en la maleta que había dejado bajo mi cama.

—No. El idiota de Kyle me lanzó agua y me mojó completamente —dije fastidiada. Lancé la ropa seca que saqué de la maleta encima de mi cama y la cerré antes de ponerla en su lugar bajo de la cama.

—¿Te refieres al sexy chico de la motocicleta? —preguntó tirándose de la cama con un salto y cayendo en el suelo. La miré seria y fruncí el ceño—. ¿Qué? Tienes que admitir que el chico es extremadamente sexy.

Lo sabía pero no lo admitiría. Y mucho menos en voz alta.

—Es un arrogante insoportable —contraataqué y ella rodó los ojos.

—Yo pienso que es lindo —dijo ahora sentándose en una esquina de mi cama. La miré como si estuviera loca y ella miró sus manos—. ¿Crees que tenga novia? —preguntó levantando la cabeza y mirándome divertida.

Puse los ojos en blanco al ver su expresión soñadora. ¿Cómo es posible que alguien encuentre a Kyle Williams tan atractivo con lo insoportable y arrogante que es?

Suspiré rendida ante sus ojos suplicantes.

—Por lo que me dijo, creo que no tiene novia por el momento —admití y tomé la ropa que estaba encima de mi cama. Ella parecía estar confundida.

—¿Le preguntaste? —preguntó sorprendida.

—Sí —confesé y luego me arrepentí. Si Julie se enteraba de que le pregunté eso a Kyle, seguramente pensaría que a mi también me gustaba. Y no es así—. Pero solo lo hice porque sabía que a ti te gustaba y le pregunté para avisarte.

Ella asintió creyéndose mi mentira. La verdad era que ni siquiera yo sabía por qué le hice esa pregunta a Kyle. Solo salió de mis labios sin permiso de mi cerebro. Miré el rostro de Julie, que ahora se mostraba lleno de alegría.