Guerra de Consejeros

Capítulo 17

—Chicos, hoy tomarán paseos en canoa. Todos escojan una pareja y tomen una canoa —dijo Naomi por su megáfono y todos los chicos del campamento tomaron sus parejas y se alejaron para tomar sus canoas. Solo quedamos los consejeros frente a Naomi.

Vi por el rabillo del ojo como Julie se acercaba a Kyle para tomarlo como pareja y suspiré. Hacía dos días que no hablaba con Kyle y las únicas noticias que obtenía de él era gracias a Julie, que no paraba de hablar de sus citas con Kyle.

Naomi se nos acercó a todos nosotros luego de su anuncio y tomó aire.

—A ustedes yo les pondré parejas —dijo y yo rodé los ojos. Rogué porque no me tocara con Kyle ni Julie. No soportaría estar con Kyle en una canoa, mucho menos solos. Pero tampoco soportaría a Julie hablando sobre Kyle—. Ryan y Julie irán en una canoa. Kyle y Elizabeth irán en otra.

—Mierda —mascullé.

—Cuida tu lenguaje, Elizabeth —advirtió Naomi y la fulminé con la mirada. Ella sabía que Kyle y yo nos llevábamos malísimo. Sin embargo, nos colocó juntos. Naomi pareció leer mi mente y volvió a hablar—. Tienen que dejar de lado ese odio mutuo. Quizás si pasan más tiempo juntos, se vuelvan amigos.

Rodé los ojos y me alejé en dirección de las canoas. Escuché pasos a mis espaldas y supuse que sería Kyle.

En poco tiempo, llegué a las canoas.

—Quizás esto no será tan malo como crees —dijo Kyle cuando llegó a mi lado. Lo miré mal y se encogió de hombros.

—No, será peor —susurré. Tenía el presentimiento de que "algo" importante pasaría en este paseo en canoa. Desgraciadamente, no sabía si ese "algo" sería bueno o malo.

—Si sigues con esa actitud, pues sí —dijo Kyle haciéndome saber que claramente yo no podía susurrar.

No le contesté. Tan solo me limité a tomar una de las canoas y, con ayuda de Kyle, logré arrastrarla hasta la orilla del lago. La canoa estaba con la mitad dentro del agua y ya estaba lista para nuestro paseo. Ojalá yo me hubiera sentido de esa forma.

—¿No deberías usar salvavidas? —preguntó Kyle con una media sonrisa. Fruncí el ceño confundida—. Por si te caes al agua.

Intenté mantener mi rabia dentro. Odiaba que él usara en mi contra el hecho de que yo no sabía nadar. Para no demostrar que me importaba, sonreí a pesar de que quería patearle la entrepierna otra vez.

—Estoy segura de que tú no dejarás que me ahogue —dije. ¿Eso aplicaba como coqueteo? ¿Estaba correcto que Kyle y yo estuviéramos coqueteando?

Por la melódica risa que escuché de Kyle, obtuve mi respuesta. Yo estaba haciendo esto mal. Pero era inevitable. Supongo que todo esto ya era tan natural entre Kyle y yo que ahora no lo podía evitar.

—Tienes razón. Jamás dejaría que algo malo te pase —dijo apagando su risa y haciendo que el ambiente tenga un toque de seriedad.

Por unos momentos, nos quedamos mirando a los ojos sin decir palabra alguna. Sabía que él decía la verdad. No porque lo haya dicho o porque yo quería creerlo, sino porque su mirada me lo transmitía. Al fin de cuentas, una mirada puede decir más que mil palabras.

Aparté mi vista de él mientras tomaba un remo y entré al agua sin que me importara que me mojara. Me adentré en la canoa, me senté e intenté no distraerme con la mirada de Kyle puesta sobre mí.