*Narra Rubius.*
Era de mañana, mangel estaba a mi lado dormido mientras me abrazaba, ¡¿Que coño?!¡¿Había tenido sexo con Mangel?!¡¿Con mi mejor amigo?!¡¿Con mi casi hermano?!¡¿Era enserio?!No me lo creo... ¡Es que no era posible!¡Me niego!¡Simplemente no!-Ma-Mangel...-Le hable mientras lo sacudía un poco para despertarlo.
-Eh...-Me dijo dormido.
-Ma-Mangel.-Le dije muy nervioso y muy pero muuuy sonrojado.-¿Es-esto que significa?-Le pregunte. Quería saber, necesitaba saber.
-Significa lo que tenga que significar.-Me dijo apretándome mas a el y a su caluroso y sudado cuerpo. Era tan perfecto.
[...]
-¿Hola?-Conteste mi teléfono.
-¿Sabes quien soy no?-Coño no, hay dios...
-¿Que quieres?
-Tu sabes bien lo que quiero.
-Pues no te lo daré ya jamas. Por eso te fuiste ¿no? Por eso me engañaste, porque te aburriste de mi.
-Callate mejor ya. Te veo en la plaza cerca del parque en 15 minutos.
-No iré.
-Mas te vale ir, porque si no ire a tu mismísima casa.
-No sabes donde vivo.
-Eso crees tu. Ya dije, allá te veo cariño...-Colgó la llamada y yo solamente pensaba en que iba hacer. No quería arriesgarme a ir porque esa loca estaría ahí, pero tampoco quería que fuera a la casa por mas que nada Mangel.-Coño...¿Que voy hacer?-Me dije tomando mi cabeza con mis manos y apretándola junto a mi cabello.-Tengo que ir.-Me paré de la banca en donde estaba sentado y me dirigí a la plaza.
[...]
La vi caminando hacia mi la muy perra.
-Hola cariño...-Me dijo tomandome de la nuca para besarme.
-Alejate estúpida.-Le ordene alejándola de mi y limpiándole los labios. Que asco dios.
-¿Por qué?¿Que acaso ya no te gusta esto?-Me dijo tomando mi mano para ponerla sobre una de sus piernas.
-No.-Le dije quitando mi mano. Mas hija de puta no podía ser.-Me da asco.
-Vamos cariño... Yo se que si.-Puso una cara de "triunfadora" porque me había tomado de nuevo de la nuca y volvió a besarme ahora poniendo mi mano sobre uno de sus pechos pero la verdad lo único que había logrado es que la odiara mas.
-No me vuelvas a decir así.-Le dije tomandola de sus muñecas con fuerza y separándola de mi.-Yo ya no soy nada tuyo. Mejor dime y dejame de molestar¿Que coño quieres?
-Te quiero a ti.
-Ja.-Le dije burlandome.-Pues sigue soñando.-Le dije y después solté sus muñecas con brusquedad para irme lejos de ahí. Quería llegar a casa con Mangel, estar con el y poderlo ver.
*Narra Jenn*
-Eso ya lo veremos... Tu solo eres mio y de nadie mas. De eso me encargo yo.-Tome mi bolso y me fui.
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Omaiga ¿Quien apareció? Cuidado Rubius y Mangel que nadie se interponga entre ustedes...
Gracia por leer. :)
