Ⓢugar Free| Suga ✖ ☚☢

Capítulo 3 ☯

Me miró a los ojos; lo miré  a los ojos.

Mi ira se sustituyó por temor en el momento que comenzó a caminar en mi dirección.

—Dime que no has hecho eso.-Espetó roncamente a unos metros, deteniendo su paso.- Niña estúpida.

Miré al suelo, quizás me había pasado un "poquito".

—Tengo una presentación ahora, y gracias a tu inmadurez tendré que llegar tarde.-Sacudió su brazo haciendo que un poco del pastel cayera al asfalto.

—Tú te lo buscaste.-Mi gran bocota habló por sí sola.- Fuiste un cretino conmigo, y lo único que quería era que cogieras un maldito pastel.-Refunfuñé como si yo hubiera sido la afectada.

Arqueó una ceja expectante, dejó escapar un suspiro formando una especie de humo blanco sobre sus labios.

Se sacó la capucha dejándose ver.

Mierda, este chico.

¿Suga? ¿De la banda esa? ¿Qué demonios era todo esto?

—¿Qué?- Me encogí de hombros restándole importancia al saber quién era.- ¿Qué pasa?-Abracé mi torso.

Jadeó suavemente mordiendo su labio, negando con la cabeza. Por unos segundos miró a su costado. Su cabello despeinado debido a la capucha que llevaba estaba sobre parte de sus ojos, aterrizaron en los míos.

—No sabes quién soy.-Aclaró como una afirmación.

Rodé los ojos.- Min Yoongi, Suga es tu nombre artístico, ¿Me equivoco?-Incliné mi rostro a un costado, totalmente escéptica a lo que podría hacerme. Alzó las cejas cruzándose de brazos.- Uno de los millones de raperos que hay por aquí; en una banda de siete integrantes, de la cual estoy cansada de escuchar.

Sonrió mirándome por encima del hombro. —¿Ah sí nena?-Rió sarcásticamente.-Es una pena, porque seguirás escuchando de nosotros por más tiempo. Yo...-Se señaló acercando su rostro amenazantemente.-Marcaré historia. Y tú...-Su mirada filosa atravesó mis ojos.-Deberías tener cuidado.

Reí cínicamente, negando sin despegar mi mirada de sus ojos. —¿Qué vas a hacerme? ¿Rayonearme el rostro con tu delineador de chica? ¿Sofocarme con los pantalones ajustados que usan en el escenario? ¿Escribir un rap insultándome?-Escupí, soplándole en el rostro a propósito.

Me miró entre las pestañas, entrecerrando sus ojos.

Era una pena que un chico así de atractivo sea así de imbécil, realmente lo era.

Por lo que parecieron minutos, se limitó a permanecer en un profundo silencio, mirándome venenosamente. Sentí mis ojos arder con tan solo la vista de su rostro.

—Buena suerte en la vida, niña.-Abruptamente se giró sobre sus talones comenzando a retomar su sereno paso.-La necesitarás si no cambias tu maldita actitud.

Mis pies se clavaron en el suelo.

¿Este rubio acababa de despreciarme?

Rabié por dentro deseando que su actuación saliera fatal, que se rompiera una pierna, que se le cayera otro pastel en su vestuario; lo que sea con tal de no darle la bendición de la buena suerte.

Aquel sujeto me había logrado atravesar con tan solo palabras en unos pocos minutos; escarbó en mi poca paciencia, y se deshizo de ella.

Estaba comenzando a odiar a un chico que no conocía, y todo porque me provocaba una sensación amarga con tan solo verlo.