Bueno tal y como prometí ayer, aquí tenéis el capítulo final de Believe in dreams, simplemente espero que os guste y que no os decepcione. Si veo que la aceptación es buena subiré un epílogo que se sitúa unos años después.
Gracias de corazón por todo el apoyo recibido durante todo este tiempo. No sabéis cuanto me han ayudado vuestros comentarios.
Espero que me dejen en sus comentarios vuestra opinión sobre el final y que se esperan ver en el epílogo. Muchas gracias de nuevo. ¡Saludos y disfrutad!
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Cuando me siento junto a los chicos, los cuales están vigilando a James que aún sigue un poco aturdido es cuando llega la policía y aquí es cuando empieza todo.
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· Solo puedo decir a mi favor, que esa pelea fue causada debido a que la protección de ella corría peligro. Este tío la estuvo maltratando durante mucho tiempo y en cuanto lo supimos conseguimos sacarla de esa casa. Poco después él se presentó en la casa donde se encontraba ella y para poder protegerla me pelee con él, el cual quería volver a llevársela, para tratarla como un juguete. Es verdad que hice mal lo de la pelea, pero no me arrepiento porque eso hizo que él no la pudiera tocar. No tengo nada más que decir señor juez. ·La última persona en testificar, será la propia Srta.Abby. Por favor suba a declarar.- Dice el Juez mientras dirige su mirada hacia Abby.
Cuando me levanto de la silla donde estaba declarando y me cruzo con ella en el camino, le rozo la mano y ella sonríe levemente. Cuando pasó esa pelea entre James y yo, esa tarde nos llevaron tanto a él como a mí a la policía y pase un día entero en ese antro encerrado. Directamente se aclaro casi todo por lo que con una leve multa me dejaron salir. A James sin embargo lo han tenido allí metido hasta el día del juicio, el cual ha sido celebrado antes con ayuda de mi padre, para que ese tío no estuviera ningún momento más en la calle.
Han pasado exactamente dos semanas desde esa pelea y lo mejor de todo es que por fin los padres de Abby, han venido a verla, ya que el hospital donde fue enviada para una revisión, les llamó para informarlos. Se les ve arrepentidos y muy agradecidos conmigo. Nos han apoyado en todo momento y no tienen ninguna duda en mi testimonio. No es la manera en la que me hubiera gustado poder conocer a los padres de la persona a la que amo, pero prefiero que estén aquí ahora dándole ese apoyo que siempre le ha faltado.
Cuando por fin me siento junto a los chicos, los cuales también han testificado en contra, me pongo a mirar fijamente a Abby, enviándole toda la fuerza que pueda para que ella pueda cargarse a ese tío.
Decidimos no meter a las demás chicas en estos, las cuales querían testificar. Ya éramos cuatro personas en contra de ese tío, también estaba el testimonio de mi padre, sobre la conversación que tuvimos en California, sobre las acusaciones anteriores hacia James y también el gran testimonio de Abby, el cual lo enviaría directamente a cualquier centro para menores, donde pueda pasar allí unos largos años.
Durante unos minutos la sala permanece en silencio, hasta que empiezan a hacerle preguntas de todo tipo y joder me sienta mal escuchar por todo lo que pasó. Una de las siguientes preguntas me gusta mucho menos.
·Abby, tengo entendido que usted estaba con el St. Bieber y que poco después de un accidente decidió salir con el acusado. Nos puedes decir, que te ha llevado a acusarlo de estos abusos. Desde el principio, por favor.- Le pide el abogado de James.
Maldito cabrón, se cree que es capaz de salvar a James de la cárcel. Que maldito incrédulo.
· Bueno eso es verdad. Yo estaba con Justin y al tener el accidente que me dejó sin memoria poco a poco fui recordándolos a todos menos a Justin. James estaba apoyándome siempre y me enamoré de él. Eso es verdad, pero poco después de que Justin se fuera, James empezó a tratarme mal. Él me chillaba e insultaba por cualquier cosa que hiciera. Me sentía inútil, ya que me maltrataba psicológicamente de mil formas. Todo eso pude sobrellevarlo un poco, pero poco a poco ya no me dejaba salir. Era mi sombra y con cualquier movimiento que hiciera él me pegaba, al principio me pedía perdón, por lo que no me parecía tan malo, podía con ello.
