El secreto de mi abuela

Entre el ruido y la desesperación

Claudia volvió a leer las palabras en el trozo de papel. Habían sido incontables las veces que lo había visto desde que llegaron al hotel, pero tenía la esperanza de encontrar algo nuevo en las pocas palabras que habían en él. Sin embargo, nada era diferente, nada tenía sentido para ella. Ese papel parecía más una sentencia de muerte que una esperanza de amor.

_ ¿Cuál te parece mejor? ¿Rojo o negro?_ Jamie extendió otro par de vestidos para que Claudia los viera, pero ella ya había ignorado los tres primeros pares. Con solo ver el primero, ya había decidido que no se pondría ninguno de los vestidos. Todos tenían el escote exageradamente largo y eran extremadamente pequeños.

_ Negro._ respondió ella, más por educación.

_ Entonces rojo será. _ decidió Jamie, sin tomar en cuenta la opinión de la pelinegra. 

Claudia lanzó un largo suspiro, envolviendose por completo con la enorme colcha que cubría la cama. De todos modos, ¿cómo era posible que haya traido tantos vestidos en su maleta? ¿O era mejor preguntar cuantas maletas había traido?

_ Entonces, ¿cuál elegiras tu?_ Jamie se sentó al borde de la cama al mismo tiempo que sostenia el vestido rojo entre sus brazos. 

 ¿Qué mas daba? Queria volver a casa para hacerle un millar de preguntas a la tía Iris, aunque sabia perfectamente que ella no se las respondería. 

_ No iré, me quedaré aqui y leeré un libro._ tan pronto como terminó de decirlo, Rapha atravezó la puerta de su habitación sin siquiera tocar.

_ ¡Claudia! ¿Estas bien?_ se arrojó sobre ella quitandole la colcha de encima, para ver su rostro, comenzó a revizarla con nerviosismo.

_ Calmate Raphael, te dije que estaba perfectamente._ Sam se apoyó en el umbral de la puerta y se cruzó de brazos.

Si Raphael estaba allí, significaba que el ultimo grupo ya habia regresado. Cuando estaban en el Museumsinsel, Sam y Raphael comenzaron a discutir hacia donde querian ir, entonces Nick para hacer la paz los dividió en dos grupos. Pero algunos tardaron mas que otros en regresar.

_ Entonces si estas bien. Sal de ahí y ponte un vestido. ¡Nos vamos de fiesta!_ Rapha comenzó a saltar sobre la cama, gritando. 

_ Oye Raphael, sino dejas de saltar si que la vas a lastima._ Sam entró a la habitación y lanzó a su hermano fuera de la cama de su prima. Jamie, no podia decir ni una sola palabra, siempre se comportaba como boba cuando esos dos estaban alrededor, lo hacia cuando todos los herederos de la familia Rochesterd estaban alrededor, no podia evitarlo. En cambio, su compañera de cuarto se comportaba más animada, parecia otra persona.

_ Ya lo decidí Raphael, ¡no iré y punto!_ gritaba Claudia, mientras Raphael la sostenia contra su voluntad en la cama.

_ Oh. Claro que irás, nosotros fuimos al museo porque querias ir. Ahora queremos ir de fiesta y tú iras._ Raphael apartó la mirada de su prima para dirigirse a su hermano._ Sam, elige un vestido para ella.

Samuel asintió y sin cuestionar a su hermano o pedir permiso a Jamie, comenzó a rebuscar entre los vestidos que estaban sobre la cama.

_ Oye hermano, estos vestidos no son para ella._ dijo Sam, mientras sostenía  un corto vestido con doble escote._ No dejaré que se ponga nada de esto._ declaró arrojando nuevamente la prenda a la cama.

_ Rapha sino me sueltas llamaré a Roxan._ Raphael palideció.

_ No te atreverias._ le retó a ella, pero Claudia no dudo el gritar el nombre de su prima que se hospedaba en la habitación continua.

_ Claudia. ¡Te dije que solo me llamaras si ne...!_ Roxan entró a la habitación, pero cayó de repente al ver a su primo sobre su prima en la cama._ ¿Serás asqueroso Raphael Rochesterd?