Luz en mis Tinieblas

La Costumbre

Lo abrazaba, él me sostenía en silencio; cuando de repente...
Alguien entró a la casa.

-Shh ¿Quien podrá ser?- preguntó

-No lo se- nos levantamos y limpió mis lagrimas -Se supone que mi abuela regresaba en la noche-

-Ahh ¡rayos! Deje la cajetilla en la mesa-

-¡No!- susurré -Si mi abuela la ve ¡me matara!-

-Ok... Piensa rápido, ¿Que hacemos?- dijo nervioso

-Bajar y presentarte como un invitado, y si no es mi abuela... Bueno, hacemos lo que la gente normal hace: llamar a la policia-

-¿Emily?- interrumpió una voz.
Era ella...

-si yo digo algo, tu me sigues él juego- le dije a Jason en voz baja.

-ok- contestó.

Salimos del cuarto de baño, bajamos las escaleras lentamente, y yo solo pensaba en que le diría.

-Hola- la salude, mire la sala ¡Es un desastre!.
La pizza sobre la mesita de centro, los vasos de refresco esparcidos, las mochilas debajo del sofá y la cajetilla sobre él ticket de compra -Abuela, te quiero presentar a alguien- le hice una seña para que Jason se acercara, él estaba tímido aun en la escalera.

-Hola- saludó seguro de si mismo -Mi nombre es Jason Connor's ¿Conoce a mi madre verdad?... Perdone por lo del otro día, cuando le cerré la puerta- amablemente le tendió la mano.

<<Vaya tiene modales>>

-No te preocupes- dijo mi abuela.

-Estaba enseñándole mi patineta- dije buscando una excusa, para explicar "el porque" estábamos en el piso de arriba -Y también mis discos, es que...-

-También me gusta la música Rock- me interrumpió Jason.

¡Bien! Así no tenia que decirle a mi abuela que estaba llorando patéticamente por algo que pasó hace casi ocho años.

-Ohh ya veo- dijo mi abuela -Emily, yo solo quería avisarte que voy a la casa de una señora para darle unas pequeñas clases a su domicilio.
Vine por mi cartera y mi estuche de costura; regresaré mas tarde de lo habitual-

-Ahh si, no te preocupes. Yo estaré aquí, ve con cuidado-

-Diviertanse, fue un placer Jason.
Luego te veo hija- dicho esto abrió la puerta y se fue.

-Adios- contestamos los dos al mismo tiempo.

Volví a sentarme, Jason hizo lo mismo pero en una silla que tomó del comedor.

-Supongo que heche a perder la película- le dije.
Se acerco a mi, y volvió a darme un abrazo -L-lo siento- susurré tímidamente.

-No importa linda- me beso la frente. -Toma termina tu pizza- agarró un pedazo y me lo dio en la boca.

-¿Quieres ver otra peli?- reí -Esta vez prometo no llorar-

-mmm.. Eso espero-

Vimos películas hasta el cansancio; mas tarde escuchamos musica.
Fue muy graciosos escucharlo cantar.
Después la pasamos en el jardin, incluso volvimos a ir a su casa para divertirnos en el columpio que tiene en el árbol que estaba fuera.
Parecíamos dos niños pequeños en un parque de diversiones, deciando que este día no acabe.

Cayó la noche, ¿Como es que él día pasa tan rápido estando con él?.

-Bueno ya demo irme, esperaré a que mi madre llegue- se recargo de la puerta.

-Si, gracias por ayudarme a limpiar. Teníamos un desorden-

-De nada- encendió un cigarrillo -¿No te vas a despedir?-

-¿De que hablas?- pregunte.

-Es que...- agachó la cabeza -Siempre me das un beso de despedida-

-Ohh Jason eres un...-

-Cierto- interrumpió -Me toca a mi- se acercó y beso mi mejilla.

Bueno, se ha vuelta nuestra costumbre.

-Adiós... Espera ¿Como entrarás?- recordé que no tenia su llave.

-Utilizare una escalera, y entro por la ventana de mi cuarto- soltó una carcajada -Es mi especialidad-

-Entonces procuraré tener la mía bien cerrada-

-Jajaja te odio- bromeó.

-Yo tambien- seguí él juego, río y se fue.

Cerré la puerta, dando suspiros.

¿En verdad entraría por su ventana?...