El Secuestro Perfecto || Elrubius

'Capítulo 25'

Maratón 1/3.

Raquel.

Estaba nerviosa, no sabía cómo decirle todo a Samuel y que al final, no se enfade. No puedo seguir haciendo esto, jugar con Samuel para olvidar a Rubén. Eso es de malas personas, y yo no quiero ser así. 

Abrí la puerta y noté que todo estaba muy callado. Raro. Samuel había venido a hacer unas cosas y me extraña que no esté aquí. Subí a nuestra habitación y escuche unos susurros. Me acerqué poco a poco y al llegar a la puerta, puse mi oreja en esta y logre escuchar una conversación. 

- Tengo miedo - logre diferenciar la voz de Samuel. 

- Tranquilo, ella sabrá lo que tiene que hacer. - dijo la otra voz. 

- Pero y si todo esto es una tapadera. 

- Si lo es, llegará el momento en que lo descubra. No puede estar así mucho tiempo, la encontraran y tendrá que volver a casa. - le explicó - Y, vosotros, iréis directos a la carcel. - continuó hablando - Sabéis perfectamente que es una de las personas más ricas del mundo, y encima tú y Rubén os enamoráis de ella. 

- Yo siempre he estado enamorado de ella. - le cortó Samuel.

- Sí tanto la hubieras querido, nunca la habrías abandonado. Tú no sabes lo mal que lo paso, yo fui su soporte durante más de un año. - replicó el otro. 

Y, hay, fue donde me di cuenta de todo. La otra persona, era Max. Claro que cuadraba todo, se suponía que iba a venir a verme y por eso, Samuel, se fue tan temprano del lago, porque iba a venir a hablar con él y que yo no me enterase. 

- ¡Max! - abrí la puerta con fuerza y me tire sobre él. - No sabes lo que te he echado de menos. 

- Dios mío, Kela, mira que grande estas. 

- No seas como un viejo y digas esas cosas, nos conocemos desde siempre. 

- Si bueno, pero hace tiempo que no nos veíamos. - sonrío de oreja a oreja - a parte del día del incidente. 

- Eso no cuenta, yo no te reconocí. 

- Cosa rara que no lo hicieras ya que sigo siendo el mismo rubio de siempre. 

- Pero más cachas. - le di un codazo a modo de broma. 

- Es lo que tiene ir el gym, chica. 

- Me alegro de verte, en serio. - le abrace de nuevo - fuistes muy importante para mí. 

- Lo mismo digo, siempre me gustara pasar tiempo contigo. 

- Ejem - carraspeo Samuel - estoy aquí. 

- Hola - dije con un intento de sonrisa. 

- ¿Pasa algo, Raquel? - preguntó Samuel con un tono de preocupación. 

- No, nada. Estoy feliz que este Max aquí. - estaba claro que pasaba algo, pero no se lo iba a decir ahora. 

- Y los chicos, ¿los has dejado allí? - dijo con un tono divertido, pero yo no logre sonreír. - Raquel, ¿qué pasa? 

- Samuel - aviso Max. 

- Yo... - no sabía cómo empezar, no me salían las palabras. 

- Será mejor que os deje solos - comentó Max mientras se acercaba a la puerta - estaré abajo. 

No sabía cómo empezar. Ni tampoco cómo reaccionaría. Se suponía que él iba a hacer que me olvidara de Rubén y tener una nueva oportunidad, la tercera. Pero yo no podía seguir con esto. Mi corazón dejo de sentir cosas por Samuel desde que me abandonó. No quería hacerle daño, pero si seguía así, acabaría haciéndolo.