Equipo de...¿frikis? ©

3.¿Primer patio juntos?

Y así es, con tan solo una semana nos convertimos en buenos amigos.

—¡Hey, chicos! —Los saludo al entrar por la puerta de clase.

Todos ríen y sacuden su mano.

Anaís no nos ha vuelto a dirigir la palabra desde la última vez. Sin embargo, no dudo en que vuelva a acercarse.

1 hora después.

Suena el timbre indicando la hora del patio. Me siento en un banco cercano a la puerta de entrada y como mi almorzar.

—Hey. —Se acerca Dalas. —¿Te vienes? —Dicho esto, señala a un grupo de chicos reducido, donde se encuentran mis nuevos amigos.

Asiento con la cabeza, sin pensarlo.

—Y bien, ¿Por qué estás tan sola? —Pregunta Jay con curiosidad.

Procedo a sentarme y formamos un círculo. Todos me miran con atención, esperando obtener alguna respuesta.

Suspiro, ¿qué más puedo perder?

Accedo, a pesar de que el tema no me agrada mucho.

—Bueno...—Empiezo a relatar, nerviosa. —Hace un par de semanas, la odiosa de Anaís extendió unos rumores por nuestro grupo. —Me aclaro la garganta. —Quiero decir. Ella nos dijo a cada uno, individualmente, que criticábamos unos de otros. Y entonces, nuestro grupo...se rompió. Sólo dos se han conseguido salvar. Y siguen hablándose. Los tres sobrantes no queremos saber nada de nadie.

Quedaron alucinados. Pero Dereck toma la palabra para romper el hielo.

—Ella es una idiota. —Pone su mano sobre mi hombro. —Tranquila. No estás sola. Me hace sentir mejor.

—Sí. —Interviene Tobias. —Siempre ha sido así. —Para en seco, pero después, habla. —¿No has hecho nada para volver a juntar de nuevo el grupo?

Suspiro de nuevo.

—Claro que sí. Y de todas las maneras posibles. Pero se niegan totalmente. De todas formas, Jack ahora pertenece al grupo popular. Phillip se junta con las chicas. Y Molly y Billy son un dúo perfecto.

—Ah. ¿Jack Weasley? —Interviene Jay rápidamente.

Asiento.

—Ahora lo entiendo todo. —Dice.

Nadie puede contener la emoción e intriga.

—¡Dilo ya, hombre!

—¿No lo sabéis? Anaís, está locamente enamorada de Jack. Obviamente es la razón por la que ha provocado todo esto. Ella solo usa a Joey para lucir bien. ¿No lo pilláis? Lo quería desde hacía tiempo en su peña.

Todos lo miramos estupefactos. Lo miramos de arriba a abajo, como esperando algo de él en algún momento determinado.

—¿Qué? —Pregunta.

Y por eso, Jay es el más maduro del grupo.

Todos nos miramos entre sí, comprendiendo, realmente las palabras de nuestro amigo.

—Pero...—Contesto, triste. —No volveremos a ser un grupo.

Dalas va a abrir la boca, pero lo interrumpe el sonido del timbre resonar por todo el centro.