Día 28: Himeneo

192 49 193
                                    


Me dicen que soy un niño llorón, pero creo que más de uno se ha ahogado en mis lágrimas.

Estas últimas semanas ha sido un tránsito continuo de lugares en donde he coleccionado historias, me he arrepentido, llorado, amado y sobre todo he perdonado.

Cuando tú comienzas a querer a alguien indiscutiblemente pasas por este ciclo de superación las veces que sean necesaria para comprender que esa persona sea la indicada, razonaba yo en mis pensamientos mientras estaba acostado en mi cama con los ojos cerrados en el limbo exacto en donde no estamos ni aquí ni allá.

*Bif* *Bif* sonó la alarma en aquella habitación de donde solo soy un huésped, me desperté de un salto y con mi pulso temblante marque el día en mi viejo calendario de bolsillo, el cansancio me había ganado habíamos tenido un viaje largo de tres horas por la carretera en medio de la nevada para poder llegar a tiempo al sitio el día de hoy, a la par creo que te puedo resumir mi resaca entre distorsiones de mi visión y un gran y agudo dolor de cabeza que se intensificaba por las ya no palabras sino gritos de Roxanne por el contestador aludiendo que nos cortaría la cabeza sino llegábamos en la próxima hora a la boda.

Espera...

*Mis ojos se abrieron vertiginosamente en una primera Impresión*

¡LA BODA!

Entre el viaje y la llegada sorpresiva a la despedida de solteros invitados por el anfitrión del ya dentro de poco esposo de la prima de Teddy (Alan), se me había pasado por completo que la ceremonia seria en horas de la mañana teniendo al reloj y Roxanne jugando en mi contra, estaré a tiempo de todo menos de estar listo para observar la bendición del padre en el altar.

Roxanne y Teddy están aquí en la brisa nevada del poblado de ámbar desde hace una semana para ayudar con los preparativos, sé que me dirás ¿en qué momento invitaron a Roxanne?, pues verás yo insistí un poco a la prima de Teddy, rodearte de un nuevo ambiente ayuda a reconciliarte contigo mismo y creo que no existe mejor forma de hacer eso que conociendo nuevas personas será una ocasión perfecta para ella, por otro parte, nosotros lo único que tenía que hacer era llegar puntuales, caso que veo dudoso, ah bueno Mike se encargó de seleccionar el licor que se va a servir en la fiesta ahora que lo recuerdo aunque de esa distribución nos encargamos ayer al llegar.

Bueno por lo menos puedo compartir mi estado de culpabilidad con mi compañero de celda, razone en mi mente mientras cruzaba el pasillo acordándome de él lanzando literalmente mi cuerpo sobre la puerta de Mike para ver si lo lograba despertar de su coma etílico.

—¡MIKEEEE DESPIERTA VIEJO, NOS VAN A MATAR! —dije yo luego de que cesara el estruendoso sonido que propulso mi cuerpo contra la madera.

Hasta que el pómulo de la puerta gira haciendo un ensordecedor chirrido al abrir procedentes de las viejas bisagras recalcándome mi insoportable resaca lleve mis manos a ambos lados de mi cabeza porque sentía que iba a explotar cuando caí dentro de la habitación teniendo una vista nada agradable de Mike que estaba con los ojos completamente rojos como si hubiera consumido sustancias ilícitas tratando de reconocer donde se encontraba a mirando en todas las direcciones.

—¿Que c***s paso ayer? —dijo él mientras se frotaba el rostro.

Me puse de pie en medio de su confusión hasta que un detalle inusual llamo mi atención

—¿Esa es una toalla sanitaria lo que está adherido a tu barba? —dije yo con cara de consternación.

Mike que no se había percatado de dicho objeto, se limitó a reír. Creó que es la primera vez que las mariposas han invadido su estómago y que no quiso tomar alcohol para ahogarlas

Éxtasis [COMPLETA] [Borrador Sin Editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora