Amor y sueños...

CAPÍTULO 6

Cuando volvieron los muchachos nos acomodamos de nuevo en grupos y comenzamos a trabajar, la hora pasaba muy lento casi ni avanzaba.

Deseaba que el reloj de una vez por todas se moviera, tan ahogada estaba entre esos pensamientos que ni cuenta me di de que me hablaban los profesores, hasta que sentí que Geral me tocaba el brazo y reaccione.

—Selene, ¿Se siente bien?

—A si discúlpeme, pero no, no me siento muy bien.

—Por favor acompañela hasta afuera para que tome un poco de aire, Morena.

Sentí un mareo y una especie de calor me recorría el cuerpo de arriba a abajo. Escuche la voz de Morena que me decía —Vamos Sele, ven conmigo ¿si?

Me levante de mi silla y la tomé por el brazo porque tenia miedo de caerme. Cuando salimos al patio le dije que quería lavarme la cara así que me llevó hasta el baño.

Ya cuando entramos le dije que me sentía mal porque Cristian me pidió para ser su novia y le dije que no porque no estaba segura y además por la fiesta que todavía estoy, mejor dicho estamos organizando

—Wow, me dejas sin palabras no se que decirte porque es muy complicado sabes. Se que quieres a Cris, pero no entiendo porque le dijiste que no.

—Morena le dije que no solo por una razón... que, no me aguante y comencé a llorar.

—Le dije que no porque no estoy preparada, además sabes que papá es muy sobre protector conmigo y no creo que apruebe nuestra relación, es por eso.

Cuando terminé de hablar con Morena y volvimos a la clase, pero ya estaba por terminar así que nos dejaron ir.

More me acompañó hasta casa y me dijo que le avisara por si necesitaba algo.

Entré y saludé con las últimas fuerzas a mis padres.

—Hola, Sel. Dijo Benja, mi hermano.

—Hola, no estoy de mucho humor el día de hoy así que no pongan plato para mi en la mesa, me voy a dormir.

—Bueno como quieras, ¿Estás segura?

—Si, pa estoy segura, que descansen. Entré a mi habitación tome mis pantuflas que usaba para salir del baño, volví a salir y me metí a ducharme. Siempre demoraba pero ese día la ducha fue corta, estaba muy cansada y desanimada.

Cuando volví a mi cuarto me estaban esperando mis adorables mascotas y una taza de capuchino bien cargado como me gustaba a mi.

Pero me dispuse a dejarlo de lado y acostarme pero no me podía dormir entonces encendí el televisor y vi que estaba Divergente, mientras la miraba pensaba que se sentiría ser una osada, erudita, abnegada, que se sentiría ¿QUÉ? Ahogada entre esos pensamientos me dormí y al parecer me desperté cuando sentí que mi móvil sonaba y ya era hora de levantarse.

Me bajé de la cama y abrí la puerta.

Inmediatamente entré al baño, me bañé y volví a salir, me saludó con su típico maullido mi gato quien se metió a mi habitación detrás de mi.

Mire mi móvil y ya eran 07:40 en un jueves hoy entramos más tarde así que no es necesario que me apure.

Después de haberme puesto el uniforme tomé mi mochila y salí directo a la cocina, cuando entré en esa sección del apartamento me asusté porque ahí parada estaba mamá con su camisón y toda despeinada, al parecer que la que se asustó no fui solamente yo ella también dio un salto para atrás cuando me vio parada con una cara de persona que no comprendía nada.

Entonces ahí fue cuando le dije — Buen día ma, ¿Cómo dormiste?

—Buen día Sel, yo bien y tú?

—Nada fuera de lo normal dormí bien.

Me senté en una silla y comí una tostada acompañada con un buen café caliente.

—Bueno ma, ya es tarde me voy.

Le dije dándole un beso en la mejilla.

—Adiós, que te valla bien.

Cuando terminó de decir esto, volví a tomar mi mochila, abrí la puerta y tomé un bus, sinceramente hoy no tenía ganas de caminar. Le avisé a More y me dijo que no pasaba nada y que debía hablar conmigo.

-Conmigo?? pensé. Si es sobre Cristian no quiero escuchar su nombre no lo quiero ni ver. En realidad estoy haciendo todo lo posible para no prestarle atención pero mi amor es más fuerte que el odio. Mientras pensaba todo eso llegué al liceo.