—Bienvenidos alumnos, sean bienvenidos. —sonrío el director— He visto mucha energía joven por aquí. —mire a mi alrededor. Nadie estaba con energía, excepto una chica que saltaba y decía que ese iba a ser su año. —Bueno, quiero recordarles las normas, por supuesto, comenzaremos por...
***
Iba camino a la pizzería más cercana a mi casa. Soy de esas personas que no les gusta ir más lejos de ahí. Escuchaba Pillowtalk y cantaba en el camino. Le había escrito a Ann para encontrarnos en el lugar. Ella había accedido y dijo que iba a llevar a una amiga, no me negué, aunque, tal vez sea falsas como las demás pero, Ann me aseguró que ella no era así, entonces le creí.Una vez llegue a la pizzería, busque una mesa y me senté. Minutos después llegó Ann y su amiga. Ella me vio y me sonrió, se acercó a mí con su amiga.
—Bella, ella es Almily. —la chica me tendió la mano y tuve que aceptársela—Almily, ella es Bella, la chica de la que te hable.
Asentí.
No estaba muy cómoda con su compañía pero, tampoco me sentía mal. Es decir, debo abrirme más con las personas de mi mismo género.
Comimos, reímos y hablamos en todo ese tiempo. Sabía que había llegado el momento de volver a la casa.
—Chicas, me tengo que ir. Adiós —me despedí de las chicas y eran al rededor de las 12:00 am. Sé que iba a ser peligroso pero, no tenía otro modo de irme.
Deje mi dinero, salí y comencé a caminar en dirección a mi casa.
Estaba todo oscuro, nada más alumbraba las luces de las casa. Un poco tenebroso pero, nada que no se pueda solucionar.
Pensaba en como mi pasado había afectado mi futuro en muchas formas, es decir, en un momento puedes ser la chicas más feliz del mundo y después te vuelves la más decepcionante. Yo no quería volver a la misma chica inocente del pasado pero, tampoco quería ser la chica ruda del presente. Había otro problema: la gente era y es muy hipócrita. La verdad, no sabemos en quien confiar porque, claramente, le podríamos estar dando la confianza a manís equivocadas, y saber que construir la confianza lleva tiempo pero, destruirla dura un segundo.
Vi como pasaba a gran velocidad la misma moto de la mañana del día anterior, de tras de ella venían 3 motos más. Dylan Cooper. Él volteo el rostro hacia mí y apretó la mandíbula. Hizo un gesto hacía sus amigos y se fueron.
Gracias por ofrecerte llevarme a mi casa. Tranquilo. Llegaré sana y salva.
Seguí caminando después de tal accidente y sentí alguien me seguía. Me negué a mirar hacia atrás, pero mis instintos decían que debía hacerlo, entonces lo hice. Dylan estaba parqueado a unos metros míos, fumando un cigarro y sonriendo con malicia. Alzó la mano y me saludó. Lo ignoré. Giré mi cuerpo y seguí caminando. En menos de un minuto, sentí la presencia de él y su moto a mi lado.
Sexy
—Deberías darme las gracias por estar acompañándote a tu casa —dijo. Lo miré sin poder creerlo.
—Yo no pedí que lo hicieras. —dije—Tu pudiste haber dejado que yo me fuera sola.
—Sí pero, necesitas a alguien que te protegiera por la noche —sonrío como si estuviese orgulloso de su respuesta. Me puse al frente de su moto y él paro de andar. Abrió la boca y la cerró enseguida.
—1. ¿Quién te crees que eres? Y 2. Yo no necesito a nadie que me proteja. Eso es todo. —Seguí caminando y deje mi cabello de lado.
—Es cierto, no perderé el tiempo en otra fácil como tú. —paré en seco, me di media vuelta y le di una bofetada que le iba a dejar una marca. Apretó la mandíbula, me tomó de la muñeca y jaló cerca de su cara. Por un momento, creí que me iba a besar pero no, se alejó y sonrío.
—Te vas a arrepentir.
***
Me voy a arrepentir.
Ha pasado una semana y no me he arrepentido de nada. En lo absoluto, lo único interesante que ha pasado, es que cogieron a un chico molestando a una chica en los baños del gimnasio.
Dylan y sus amigos han faltado a varias clases y por supuesto, el director no sabía, pero ellos estaban vendiendo cervezas a los de grados menores.
Pff, no tenemos nada que hacer con ellos.
—¿Qué clase tenemos ahora, Bella? —pregunta Luck.
—Biología —me mordí el labio. Teníamos un examen y yo no estaba tan preparada. Al parecer, para nada. Pero, aun así tenía fe de que lo ganaría.
—No estudiaste, ¿Verdad? —negué con la cabeza— Esta bien, yo te pasó las respuestas.
Solté el aire que había estado conteniendo.
— Por eso, amigo mío, te amo.
++++
Hola.
Sé que es muy tarde en algunos países pero, aquí está lo que me pidieron.
Dylan en multimedia.
Yo amo la actitud de Bella.
Voten y comenten.
Sinceramente, pido más comentarios para seguir montando.
Gracias.
Los amo.
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My Bad Boy
Novela JuvenilAl principio todo en mí era oscuro. No había amor, cariño, afecto. Mi mundo era negro. Pero algo cambia. Llega él. Él debería ser mi salvación, mi color blanco, y todo eso. Pero... ¿Y qué si mi mundo sigue siendo negro con él adentro?