Al principio todo en mí era oscuro. No había amor, cariño, afecto. Mi mundo era negro.
Pero algo cambia.
Llega él.
Él debería ser mi salvación, mi color blanco, y todo eso.
Pero...
¿Y qué si mi mundo sigue siendo negro con él adentro?
Mi madre me había levantado y le pedí que no levantara a Luck porque yo iba a hacerlo. Con una sonrisa malévola, fui en busca de un vaso con agua y cuando llegue a mi habitación, Luck todavía estaba dormido; primero le tomé una foto y después le eche el agua. Reí a carcajadas cuando se levanto asustado.
–Me la debías por hacerme hablar con Dylan –puse mi mano en mi boca como si estuviera sorprendida. Él gruño–. Buenos días, Luckicito.
Él detestaba ese sobrenombre y entonces reí más fuerte.
–Esta bien, Bella.
***
Otro día más de escuela y yo sin ganas de aprender nada. Estaba al lado de Ann y Alm. Dylan estaba diagonal mío y Kelsey al lado de él. ¿Sabrá Alex sobre el bebé? ¿Tendría que decirle? Sí lo haré. Saque mi teléfono y le escribí un mensaje a Alex.
Mensaje de Bella:
Necesitamos hablar. – 10:08 am
Mensaje de Alex:
Claro, :) –10:16 am
Mensaje de Bella:
¿Dónde nos encontramos? –10:19 am
Mensaje de Alex:
¿Te molestaría venir a mi casa? –10:21 am
Mensaje de Bella:
No, por supuesto que no me molesta. –10:22 am
Mensaje de Alex:
A las 3, ¿vale? – 10:23 am
Mensaje de Bella:
Vale. –10:25 am
–Señorita Rouse, ¿le molestaría decir con quién hablaba por teléfono?
—Claro que no, profesora. Hablaba con Alex Blanch. Si sabe quién es, ¿no? El chico no vino a clases hoy y lo estoy poniendo al día —sonreí de una manera manipuladora.
Kelsey y Dylan me miraron sorprendidos. Aunque a Dylan, se le notaba un poco de celos. Él me trataba de decir algo pero yo miraba a otro lado.
—Así debe ser. Tomen ejemplo de la señorita Rouse —sonreí—. Sigamos con la clase. Entonces, la literatura Romántica no fue algo más que....
*** Era la salida y yo debía ir donde Alex.
–¡Bella! –comencé a caminar más rápido sabiendo quién me estaba llamando –Déjame llevarte a casa de Alex –gritaba Max, el amigo de Dylan. ¿Cómo sabía que yo iba para allá?
Me di la vuelta y sonreí falsamente. No había olvidado que él y su novia me había drogado.
–No, gracias, yo tengo auto –me di vuelta para retomar mi camino pero él volvió a hablar.
–Perdona, por...ya sabes. Fue Elizabeth. Termine con ella después de eso, no soporte ver como te hizo ese daño y también fue mi culpa por no haberte dicho que esa bebida tenía droga. Ella creía que era buena idea ponerte en nuestro ambiente, ya sabes –mire al parqueadero de la escuela. Elizabeth estaba hablando con sus amigas pero, tenía la mirada directa hacia mí.
–Está bien, Max. ¿Terminaste? No debes explicarme más nada.
–Al menos, déjame invitarte un café. Acéptalo, por favor. Y así podremos hablar bien, ¿te parece? –dijo y de verdad se le veían ganas de hablarme pero, yo no estaba lista para hablar con alguno de ellos.
–Lo pensaré –busque mis llaves del auto de mi madre y me subí. Puse mi GPS para ir a la casa de Alex. Una vez que llegue, tuve que forzar para cerrar la boca. Era una casa divina.
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Cuando llegue, me baje y toque el timbre. Una señora me abrió y llamó a Alex.
–Hola Bel, ¿cómo andas? –dijo y yo reí.
–Hola, bien, gracias –me dejo pasar a su sala y cada vez me gustaba más esa casa. Por lo visto, Alex vive bien y puede tener sus comodidades. Hablamos por un tiempo y lo ayude a cocinar. Pasamos un momento agradable.
–¿Qué era eso que me querías decir? –Bien, Bella, es ahora o nunca.
–No sé como comenzar. Bueno, esto fue lo que pasó....–comencé a decirle a él todo lo que había pasado y lo que estaba pasando. Sus caras decían todo y tal vez, hasta más–. Lamento, haber sido yo quien te contó.
–Estoy algo confundido porque yo también estaba con ella hace 4 meses. Recuerda que ella engañaba a Dylan conmigo –me puse a pensar y si estábamos llegando a esa conclusión, me alegra–. Tal vez, debería decirle que hagamos la prueba de paternidad. Si el bebé es mío, responderé por él. Lamento que por culpa de ella, hayas terminado con Dylan.
–Todo está bien, me gustaría que hagas esa prueba lo antes posible, ¿si? –le dije esperando que el bebé no fuera de Dylan. Él asintió. Después de pasar un rato más juntos, debía irme. Cuando estaba lista para irme, Dylan entra por la puerta principal y me ve ahí, en la casa de su mejor amigo.
–Bella, ¿qué haces aquí? –me pregunto.
–Yo...yo ya me iba. Gracias, Alex. –cuando salí de la casa de él, Dylan estaba detrás mío–., no debes seguirme, Dylan, yo me sé el camino a mi casa.
–Lo sé, solo quiero decirte que no pararé hasta tenerte de vuelta y solo quería que lo recordarás –me dijo y claro que lo iba a recordar. Asentí y me fui.
De hecho, no iba para mi casa. Iba directo al salón de belleza.
Bella iba a cambiar.
Yo necesitaba cambiar.
++++ HOLAAAAAA A TODO EL MUNDO. Se preguntarán: ¿por qué Natalia estará subiendo tanto de repente? Amigos, he estado enferma toda la semana y he tenido bastante tiempo para escribir, ya que no he ido a la escuela. Y pues si, he escrito. Sé que amaran el cambio de Bella tanto como yo. Gracias <3 Voten y comenten. Los amo.
