Empezar de cero

Capitulo 4: Cumpleaños

-Buenas noches Valeee- le digo a Valentina.
-Buenas noches nena, qué guapa vienes hoy- doy un vuelta sobre mí misma.
-Venga empecemos- salimos de los cambiadores y empezamos a trabajar.
Son las 00:30 y la discoteca está a rebosar. Como siempre acabo mi turno agotada.
La semana se me pasa volando, trabajos, deberes... He empezado a notar las horas de sueño que me faltan cada noche, así que en cada hora libre que tengo duermo o hago deberes para después no hacerlos en casa. Los amigos de Mer me han acogido como una más, de echo me han invitado al cumpleaños de uno de ellos pero como tengo que trabajar no podré ir.
Es viernes y son las 23:30 y esta noche me toca en los reservados, menos mal, porque los viernes en la pista de baile deben ser una locura.
La gente empieza a entrar y parece que no cabe ni un alfiler más.
Hoy me toca junto a Valentina toda la zona reservada y solo están ocupadas un par de mesas pero al parecer esta noche se celebra un cumpleaños aquí, así que habrá muchísima gente.
Son las 00:30 y los invitados de la fiesta de cumpleaños ya están aquí, son adolescentes y ninguno supera los 20, como yo.
Valentina y yo atendemos a los adolescentes y no descansamos ni un segundo, son muy exigentes.
Por fin, al cabo de 30 minutos más aparecer el del cumpleaños, no consigo verle la cara porque está oscuro.
Me dirijo a él para saber si quiere algo pero entonces cuando habla el pelo se me pone de punta.
-¿Desea algo?- preguntó amablemente.
-¿Nina?- pregunta Matt.
Mierda, el del cumpleaños era el. Miro a mi alrededor y veo a Mer y a todos los de su grupo.
-¿Matt? No sabía que vendrías.
-Si, me habían dicho que este sitio era un buen local para hacer fiestas, así que aquí me tienes- sonríe- ¿Qué haces aquí?
-Trabajo aquí- señaló mi vestimenta y la bandeja de las bebidas.
-¡Ah! Con que era esto lo que tenías que hacer esta noche- asiento- espera, que llamo a los chicos para que te vean- voy a taparle la boca pero es demasiado tarde, ya ha empezado a gritar.
-¡Eyyyy! Chicos, venid- todos se acercan.
-¿Nina?- pregunta Mer.
-Si, la misma- sonrío.
-¿Qué haces aquí?- pregunta Caroline.
-Trabajo aquí- todos abren los ojos desmesuradamente.
-¿Y por qué no nos lo dijiste?- pregunta Mike.
-Porque no quería que nadie se enterase y tampoco me gusta que le gente sepa dónde estoy en todo momento- todos asienten.
-Así que aquí trabajabas, eh- dice Cristian.
-Si.
-Al final todo se sabe, ya sé dónde puedo encontrarte- dice sonriendo.
-Ya bueno... ¿Queréis algo?- miro a todos.
Todos empiezan a pedirme un montón de cosas y a convencerme de bailar un momento con ellos pero no, como se entere mi jefe seguro que me echa.
Llego a la barra y empiezo a preparar las bebidas, Valentina que lo ha visto todo se acerca a mi lado y empieza a preguntarme por lo sucedido.
-Así que esos son tus amigos de la universidad- mira a todos- que guapos son- soltamos una carcajada a la vez.
Los invitados de Matt no dejan de entrar y la sala se está llenando, llamo a más chicas ya que Valentina y yo estamos saturadas.
Me quedo en la barra, preparando las bebidas, vigilando la caja registradora y viendo quién entra y quién sale.
La puerta se abre de nuevo y esta vez entra un gran grupo de personas, unas 15.
Hay dos personas que lideran el grupo y estos son los que se acercan a Matt y lo felicitan. El grupo de dispersa y las dos personas que lideraban el grupo se acercan a la barra, estoy sacando los vasos del lavavajillas, así que no presto mucha atención a sus rostros.
-¿Me das dos margaritas?- pregunta una chica con la voz chillona.
-Si, ahora mismo, espere un minuto- dejó los vasos en su sitio y empiezo a preparar los margaritas.
Al cabo de 5 minutos ya están hechos, se los entrego a la chica.
-Tome- la miro a la cara, es Alison. Ella también lo hace y parece reconocerme.
A su lado está Derek, mirando a la pista.
-¿Nina?- dice Alison, Derek se da la vuelta y me mira.
Los dos me miran, esperando una respuesta.
-Si, la misma que viste y calza- sonrío.
-¿Qué haces aquí?- pregunta Alison.
-Trabajo aquí- la contesto mientras hago unos cubatas. Mi respuesta parece haberla disgustado porque empieza a poner malas caras.
-Vaya... No sabía que trabajas aquí... En este... Sitio- mira al local con cara de asco.
-Si, algunas personas nos tenemos que ganar la vida de alguna manera ¿no crees?- Derek parece contener la risa.
-¿Y tus papas? ¿No tienen dinero? Y si es así ¿Qué haces en nuestra universidad?- dice Alison como si nada, Derek parece haber visto un fantasma porque la sonrisa de antes se ha esfumado.
-Si, si tienen dinero pero es que me gusta ganármelo por mí sola. No soy una hija de papa- parece que el comentario la ha ofendido, menos mal.
-Prefiero ser una hija de papa a trabajar de... Prostituta.
-Alison, basta- dice Derek, la coge del brazo e intenta llevársela pero ella no se deja.
-Mira bonita, esto es ser camarera y no prostituta, creo que estás confundiendo conceptos.
Alison me mira el canalillo y levanta un ceja.
-¿Para ser camarera tienes que ir semi desnuda?- pregunta mirándome de arriba a bajo.
-No pero es que me encanta este conjunto, además no tiene nada que ver, tú llevas una bragas y un sujetador, porque eso ni  es una camiseta- digo señalando el top- ni eso es una falda- digo señalando su mini falda- y no eres camarera ni puta, aunque lo último se podría discutir- Derek suelta una carcajada.
-¿Y tú de qué te ríes? Soy tu novia, haz algo- mira a Derek.
-Alison te he dicho que nos fuéramos pero no me has hecho caso, así que ahí está, tu propia medicina- dice Derek.
-Esta noche tú y yo hablamos seriamente- deja de mirar a Derek y me mira a mi- y tu, ya nos veremos.
Dicho eso da media vuelta y se lleva a Derek con ella.
Me quedo mirando cómo se van, hasta que veo a Cristian en el medio.
-Vaya, vaya con la Barbie- le miro extraña- me lo ha pegado Mer- sonrío.
-Mer no es buena influencia- digo riéndome.
-¿Cómo que nos soy buena influencia?- pregunta Mer que nos ha escuchado- ¿qué le has dicho Cristian?- pregunta sentándose en una silla.
-Ha sido ella, yo no he dicho nada- dice Cristian levantando las manos.
-Más te vale- me mira a mi- ¿Qué ha pasado?
-Nada, ya sabes, nunca falta la pesada de turno- las dos soltamos una carcajada.
-Yo no los he invitado, te juro que he hecho lo imposible porque no viniesen pero Matt y Derek entrenan juntos y como el es el del cumpleaños nos toca aguantarnos y soportarlos- asiento.
-Tranquila, no pasa nada- sonrío.
-¿A qué hora acaba tu turno?- pregunta Mer.
-A las 6- Mer casi se atraganta con la bebida.
-¿Y es así todos los días?- asiento-¿Trabajas todos los días?
-No, libro los domingos.
-No sé cómo eres capaz de soportar la universidad con el ritmo de vida que me llevas- niego y sonrío.
-A veces yo también me lo pregunto pero es lo que toca.
-¿Algún día me vas a contar por qué has venido a Nueva York?- dice Mer, se me cae el vaso que tenía en la mano- lo siento, no era mi intención hacerte sentir incómoda.
-No, no pasa nada, ha sido un descuido- empiezo a recoger los cristales, menos mal que los demás con la música no se han dado cuenta.
-Espera que te ayudo- niego.
-No, ya lo hago yo que para eso trabajo aquí.
-Voy al baño, nos vemos luego- dice Mer,
asiento y se va.
La noche se me hace eterna, todos me hacen las mismas preguntas: ¿Trabajas aquí?¿Por qué?¿Hasta qué hora?¿Pagan bien?.... Y me ponen muy nerviosa, así que dejó a Valentina y a otras chicas a cargo de los reservados y me dirijo a la salida, necesito descansar un poco.
Cuando salgo me enciendo un cigarro y empiezo a fumármelo, veo como la gente pasa por las grandes vías mientras yo estoy en el callejón de detrás de la discoteca.
Sigo fumándomelo y entonces sale Cristian.
-Así que aquí estabas eh- se enciende un cigarro.
-Necesitaba un poco de aire me estaban haciendo muchas preguntas- Cristian sonríe.
-Es lo que tiene no contarnos que trabajas en una discoteca- tuerzo los ojos.
-Te lo he dicho, no me gusta que la gente sepa dónde estoy las 24 horas del día- me fumo la última calada y me dispongo a entrar.
-¿A qué hora sales?- miro la hora y ya son las 5:00
-En una hora- Cristian asiente.
-Te esperaré en la salida- niego.
-No gracias- Cristian suelta una carcajada
-Te voy a dejar en tu casa, no iremos a ningún otro sitio al cual no quieras ir
-Vale vale, nos vemos- dicho eso entro de nuevo y me dirijo al baño, me meo entera.
Menos mal que son las 5:00 y ya no hay tanta gente como al empezar la noche, no hay chicas en los baños así que entro directamente.
Al entrar escuchas unos gemidos, no quiero saber lo que está pasando ahí dentro.
Hago el baño rápidamente e intentó salir lo más rápido posible pero entonces la puerta de al lado se abre y salen Alicia y Derek juntos.
-¿Qué hacías aquí?- pregunta Alison
-Por si no te has dado cuenta es un baño y una tiene sus necesidades- me lavo las manos y me dispongo a salir.
-Venga, vete a servir y a chuparla- doy media vuelta y me dirijo a ella.
Quedamos frente a frente y entonces la pego un puñetazo en el moflete.
-Entérate de una vez, soy camarera cacho de zorra y si vais a follar, follar en cualquier otro sitio que dejáis el SIDA en el baño- doy media vuelta y salgo del baño.
Antes de cerrarse la puerta veo como Derek se acerca a Alicia a consolarla.
Suelto un bufido y me dirijo a los reservados, tengo que seguir trabajando.
Ya no hay tanta gente, solo quedan los amigos más cercanos y unos cuantos borrachos.
Busco a Mer y la encuentro dormida en un sillón, despeinada y con un vaso en la mano.
-Mer, mer- la intento levantar, hasta que se despierta.
-Nina, creo que estoy borracha- sonrío.
-No creas, estas borracha- la levanto del sillón-Vamos, que te llevo con Cristian- Mer asiente.
Estamos en el callejón detrás de la discoteca y Cristian sigue donde le dejé.
-Cristian, Mer está un poco borracha, creo que lo mejor será que la lleves a casa- Cristian mete a Mer en el coche y la deja acostada en los tres asientos de detrás. Niega con la cabeza.
-No, me esperaré a que termines tu turno y te llevaré a casa- niego.
-Me queda un poco, mejor llévala a casa, tiene mal cara- Cristian suelta un suspiro de frustración.
-De acuerdo pero solo porque tengo miedo que me vomite en el coche- sonrío y asiento.
Cristian sube en el coche.
-Nos vemos- digo yo mientras me despido con la mano.
Me dirijo de nuevo a los reservado y empiezo a recoger la sala, ya que no queda nada para que acabe mi turno y ya no hay casi nadie, a los que quedan los echaran los guardias.
Después de una larga noche al fin mi turno acaba, me despido de Valentina, recojo mis cosas y salgo de la discoteca para ir a la estación de tren.
Cuando estoy girando la esquina alguien detiene el coche y pita.
-Sube, que te llevo a casa- es Derek.
-No gracias- sigo caminando.
-No estoy con Alison- me detengo y me dirijo a la ventanilla de su coche.
-No me subo a tu coche porque no esté ella, si no porque no me da la gana y prefiero ir a mi casa sola que mal acompañada- me dispongo a irme pero entonces el sale dela coche.
-Venga, vente a mi casa y pasemos una buena mañana ¿no quieres repetir lo del otro día?
-¿A caso no tienes novia?¿qué pasa con ella?¿No se supone que la quieres?
-No se tiene por qué enterar- se acerca a mí pero yo retrocedo.
-Que no quiero nada contigo, no me gusta y si ese día nos acostamos fue porque tuve un desliz y haz el favor de respetar a tu novia porque si no la quieres y la engañas no se para qué estáis juntos- Derek nueva con la cabeza.
-¿Quién te ha dicho que no la quiero?- se acerca a mí y siento su aliento cerca, esta borracho.
-No la quieres porque si la quisieras no la trataría como la tratas ni la pondrías los cuernos- Derek da otro paso hacia mí pero yo retrocedo dos más.
-Venga, no te arrepentirás- niego.
-Estas borracho, tienes novia y no me gustas, ve a tu casa pero caminando, deja el coche aquí y cuando puedas vienes a recogerlo- suelta una carcajada.
-Ni de coña voy a dejar mi coche en esta avenida, me voy- corro hacia él y le detengo.
-Derek estas borracho- quita mi mano de su hombro de mala manera.
-Déjame en paz, sé cómo llegar a mi maldita casa- dice mientras se sube en su coche.
Levantó las manos en forma de rendición, retrocedo y sigo mi camino.
Derek arranca y se va como alma que lleva el diablo.
Al fin llego a mi casa y me acuesto en la cama, ya era hora.

Capítulo 4!💕😘