19. Siempre fue uno de los nuestros - ChenMin

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Chen se encontraba en su habitación caminando en círculos, tratando de pensar en lo que iba a decir si su hermano despertaba. Era medio día y aún seguía durmiendo, si su pareja despertaba cuando la luna estuviera en lo más alto sería peligroso para ambos, perderían el control, dejándose llevar solo por sus instintos.

Lay entró a la habitación de Chen sacando a éste de sus pensamientos. —Vine a ver como está. —Se hizo un silencio incómodo. —Y a prepararlo para esta noche. —Comentó Lay acercándose a la cama donde reposaba el cuerpo de Xiumin. —¿Y si no despierta esta noche?... ¿Y si lo hace mañana? —Pregunto con esperanza, mientras Lay limpiaba el rostro del menor y lo alistaba para el festín de la noche. —No sé mucho sobre esto, sabes que no hace mucho yo era como él; un humano, pero la sangre llama y puedo sentir las ansias de esta noche, la luna nos está llamado, si yo lo siento él también lo debe de sentir. —Posó la vista en Chen y al verlo notó el temor que sentía. —Tranquilo todo va a estar bien. —Trató de consolarlo. —Ahora voy a cambiarlo... Suho te espera en la sala. —Y con eso Chen salió de su habitación.

—Le envié un mensaje a papá. —Aquello tomó por sorpresa a Chen. —Quita esa cara, te alegrará saber que papá y mamá están felices de que hayas encontrado a Mienseok, pero temen la reacción que tome. —Chen solo bajó la cabeza en señal de arrepentimiento. —Que voy a hacer Suho, si el me rechaza... si me odia por lo que le hice... no lo soportaría. —Terminó Chen, sentándose al frente de su hermano en uno de los mueble. —Tú no le hiciste nada Chen. —Excepto tal vez despertarlo sin su consentimiento. —Habló el mayor para consolarlo.

—Esperé tantos años Suho creí que estaba muerto y ahora que lo encuentro solo empeoro las cosas... de verdad lo siento, no quise... —Suho no le permitió continuar. —Lo sé Chen tal vez no sé cómo te sentiste estos años, pero... sí sé lo que se siente tener a tu pareja entre tus brazos, no te culpo, solo espero que Minseok te sepa comprender.

—¡CHEN! —Se escuchó un grito que provenía de la habitación donde se encontraba Minseok o Xiumin, como lo llamaban sus hermanos. Ambos corrieron de inmediato hacia la habitación, encontrándose con un Lay pegado a la pared y listo para ser el primer alimento de Xiumin quien lo tenía apresado y listo para clavarle sus nuevos colmillos. Suho se apresuró y se interpuso en medio de Lay y Xiumin mientras Chen tomó de la cintura a su pareja separándolo de Lay.

—¿Te encuentras bien? —le pregunto a Lay, tomándolo por la cintura. —Si, no te preocupes, pude haberme defendió ¿sabes?... —Le reclamó. —Lo sé, pero recuerda que estas embarazado y no puedes hacer esfuerzo. —Le susurro en su oído haciendo que el menor se estremeciera. —No...hagas eso. —Logró articular Lay. Suho sabía por lo que estaba pasando su pareja ya que el sentía lo mismo, la Luna los estaba empezando a llamar, solo era una noche al año en la que los vampiros lobos, y otras especies entraban en celo o se vinculan entre sí completando la unión para siempre y esa noche era justamente esa. Se giró para ver a Xiumin envuelto en los brazos de Chen muy tranquilo para su sorpresa, pero no para la de Lay. —Mientras tu tacto esté sobre él lo calmara, en especial en esta noche él te necesita. —Tanto Chen como Suho se miraron y miraron a Lay. —¿No lo sientes? ¿Cómo te está empezando a quemar la piel? Y solo cuando lo tocas parece calmarse. —Les dijo a los dos. —¿Cómo sabes?. —Preguntó Chen.

—Por qué es lo mismo que sentimos nosotros y los de nuestra especie al estar cerca de nuestra pareja destinada, es lo mismo que sentí yo cuando vi a Lay. —Respondió Suho, cargando a su pareja al estilo princesa y se lo llevó dando un breve asentimiento de cabeza a su hermano que seguía aferrado al cuerpo de Xiumin.

Una vez solos en la habitación Chen tomó a Xiumin en brazos y lo depositó en la cama mientras Xiumin se mantenía consciente de sus actos estaba terriblemente asustado, pero la repentina sed que sentía era más fuerte que su voluntad, por eso se abalanzó sobre aquella persona que al parecer estaba cuidándolo, pero gracias a los dioses alguien lo detuvo envolviendolo con sus brazos haciendo contacto con su cuerpo que en un instante no solo lo tranquilizó sino que redujo un poco esa necesidad.

♣ EL PRESAGIO & AKAMY - EXO ♣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora