Capitulo 14

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Chelsea:

Sinceramente me importaba nada lo que Vanessa pudiera hacer para vengarse de mí. Que me haga todo el daño físico y psicológico que puede, al fin y al cabo no venimos a sufrir al mundo.

-¿Qué no tienes que decir?-pregunta Sid.

-me entere de todo esto gracias a Clarisa.-dice April.

-¿Quién carajo es ella?-pregunto.

-es mi prima.

-okey, y que descubrió.

-bueno como ella es parte del club de porristas pudo averiguar que Vanessa junto a Suzanne no se van a quedar de brazos cruzados.

-¿Qué harán?-pregunta Sid.

-empezando por quitarte calificaciones y toda acción que hagas será considerada como un acto de mala conducta. Hasta que ha Chelsea la intentaran de humillar lo más que puedan.

-no me importa.-dice Sid mientras se sienta al lado de Alexa.

-pero a nuestros padres les molestara ver eso.-le digo a Sid.

-¡mierda! Tienes razón. Saben que, me voy.- dice y se del hospital muy molesto.

-¿Qué le pasa?

-el odia a papa y mama.

-¿Y?

-mis padres siempre le han exigido mucho académicamente y él logra complacerlo pero siempre le hallan un error a su persona.

-él es alguien muy correcto.

-lo sé pero mis padres nunca lo verán así.

-menuda mierda.

-por eso Sid al acabar la preparatoria quiere largarse de Vancouver.

-¿A dónde quiere ir?

-dos opciones, Los Ángeles o Manchester.

Sídney:

Maldita, zorra, malparida, puta, mierda, odiosa, son las únicas palabras que pasan por mi cabeza al mencionarme a Vanessa Roswell. Si hay algo que odio son los molestos que son mis padres y que nunca los puedo hacer feliz, son sobreprotectores y en algunos momento inmaduros, un fastidio en pocas palabras. Pensándolo bien creó que se me ha olvidado una frase correcta para Vanessa.

NO LA PARIENRON, LA CAGARON

Suelo ser muy bueno para inventar frases para maldecir a todos es la parte que más odio de mi pero a la vez es la que más disfruto. Camino hacia la casa de Luna donde espero que hoy si este en su casa y no toparme con Cameron como ayer en la noche.

El día seguía siendo algo frio pero no como ayer en la noche, por fin llegue. Toque el timbre y ella salió, tenía el pelo perfecto como era de costumbre pero ahora corto hasta los hombros.

-hola guapa.-la saludo.

-hola Sid. Que sorpresa que haiga venido.

-sí, estaba en el hospital y pensé en venir a verte.

-oh, claro está bien ¿quieres pasar?

-¿A tu casa?-le pregunto tartamudeand

-sí. Solo estoy con mi hermano.

-¿Cameron?

-sí, ¡oye! ¿Cómo sabes su nombre?

-ayer vine a buscarte y el me abrió la puerta.

Chelsea y SídneyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora