Capítulo 31

308 15 4
                                    

Hubo un momento en que estábamos demasiado cerca, hasta que me besó.

-Esto.. -Dije separándome y poniendo mi cabeza en su hombro muerta de vergüenza-

-Lo siento. -Dijo Gonzalo- Yo...

-No hace falta decir nada -Sonreí- Solo que no me siento cómoda sabiendo que tengo novio a medias -Suspiré-

-Bueno, tranquila -Volvió a sonreír- No lo volveré a hacer, lo juro

Solo me limité a sonreír. Continuamos bailando como si no hubiera pasado nada.

[Narra Marta]

-Hola preciosa -Dijo una voz bastante conocida y me giré-

-Maldita sea. ¿Que haces aquí?

-¿Yo? Pues estar con mis amigos -Sonrió- Pero vi a una preciosidad y me he obligado a pararme para hablar con ella. -Esbozó una sonrisa y se acercó-

-Bueno, bueno. Te alejas ¿Si? No quiero volver a tenerte tan cerca como ayer.

-¿Estas segura? -Me cogió por la cintura- Porque por lo que veo en ti, te haces la dura, pero te mueres por besarme -Reí irónicamente.-

-¿Yo? ¿Besarte a ti? Venga ya. Y yo soy Winnie the Poh. ¿Lo sabías? Ahora, suéltame. -Le ordené-

-¿Porque tanto rencor hacia mi preciosa? ¿Eh?

-Quizás porque me llamaste estúpida -Negó con la cabeza-

-Yo nunca te dije estúpida, en todo caso te llamé imbécil y ya te pedí perdón por eso. ¿Porque eres tan rencorosa?

-Pues no lo se -Suspiré-

-¿Ves? Ya vas aflojando.

¿Que coño tenía este chico que me ponía de los nervios? ¿Porque? Es una sensación muy rara. Hugo me cogió de la mano y me llevó a la pista, dejando a Eunice y Andrea solas. Cuando estuvimos en el centro, volvió a cogerme por la cintura y empezamos a bailar. Giré mi cabeza hacia un lado y ¡Oh dios mio! Mimi se estaba besando con el chico que había conocido y de repente se separó y puso su cabeza en el cuello, muerta de vergüenza. ¡Que chica! Y no quería ligar esta noche. Volví a mirar a Hugo y él me sonrió, me dio un par de vueltas y se acercó aún más. Notaba su aliento a alcohol rozar mis mejillas. Tenia los nervios a flor de piel. Hugo puso su cabeza en mi cuello y lo fue besando poco a poco, hizo un recorrido en él y se paró en mi oreja, mordisqueandola. Vale, eso es jugar sucio. Fue dejando besos por mi barbilla hasta llegar a la comisura de mis labios. Me miró con una sonrisa coqueta y me cogió la cara y me aproximó a él. Estábamos a centímetros, mis ojos se cerraban y ese beso nunca llegaba. Abrí los ojos y Hugo esbozó una sonrisa.

-Para caerte mal, esperas ansiosa que te bese.

-Eres un idiota -Dije apartándolo de mi-

-¿Yo soy el idiota? Creo que no. Eh, Marta -Sonrió malicioso- Tanto que te preocupas por maltratarme psicologicamente y ser una borde conmigo, te bailo un poco el agua y deseas con todo tu corazón que te bese -Rió-

-Eres un hipócrita -Gruñí-

-¿Si? ¿Y que más soy? -Se cruzó de brazos- Venga, desahógate y dime todo lo que se te pase por la cabeza.

-No pienso malgastar más tiempo contigo, así que si me disculpas...

Me abrí paso entre la gente y fui donde anteriormente estaban mis amigas, pero ya no estaban. ¿Donde coño se habían ido? Estaba frustrada y muy enfadada. ¿Desde cuando dejo que los chicos jueguen conmigo? Salí a fuera y me senté en el borde de la acera. Me sentía tan estúpida... No le volvería a hablar en mi vida. ¿Pero quien se cree que es? ¿Porque juega así conmigo, si realmente no me conoce? ¿De que va?

Pude confiar en ti nada más conocerte - Auryn - ÁlvaroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora