La hija de Marilyn Manson

Capitulo 21 (Final)

Mi padre Brian, llego a Rusia ayer por la noche, no pudimos hablarnos ya que llegaron muy tarde y estaban cansados del viaje. Hoy era sábado y habíamos quedado en una cafetería del mi ciudad para vernos cara a cara y hablarnos.

Estaba en mi coche dirección a la cafetería y al lado mío estaba mi novio Borya. Estaba muy nerviosa, iba a volver a ver a mi padre después de tantos años y no sabía como reaccionar y estoy también como un  poco asustada y no se porque.

-¿Estas nerviosa?-Pregunto Borya mirándome.-Si un poco.-Dije yo sin apartar un momento la mirada hacia la carretera.-Es normal, después de tantos años es normal que estés muy nerviosa.-Dijo el con una sonrisa para romper un poco el hielo.

-Bueno, tu también deberías estar nervioso, vas a conocer a mi verdadero suegro.-Dije yo sonriendo.-Si es verdad, tendré que volver a la tortura de antes para caerle bien ¿No crees?-Dijo el riéndose.-Si.-Dije yo también riéndome.-Dime una cosa, ¿Estas enfadada con tu padre por dejarte en un centro de adopción?

-No...Al principio si que estaba enfadada con el cuando me envío halla sin un porque y eso me destrozo el corazón, pero al cabo de unos meses en el orfanato lo comprendí. El estaba pasando por un mal momento, la prensa le acosaba por unos mitos falsos que sacaron algunas personas para hacerse ellos famosos y por eso me tuvo que enviarme a un centro de adopción, para que yo tuviese una vida mejor.

-Vaya...Eso es muy sorprendente, pero creo que ya lo habrá enfrentado a estos problemas.

-Si, seguro que si, conociéndole a el seguro que se pudo salvarse...

Minutos después llegamos a la cafetería, veía muchos coches de color negro y furgonetas y eso me dio la sensación de que mi padre ya estaba dentro. Aparque mi coche en el parquin y salimos del coche y fuimos directos a la entrada de la cafetería.

Las puertas eran de cristal y pude ver que dentro estaba el hablando con alguien, mi corazón estaba latiendo muy rápido y creo que estaba sudando de los nervios pero me arme de valor y abrí la puerta. Al abrir la puerta todas mis miradas se fijaron en mi incluida la de Brian, el estaba un poco sorprendido en verme, seguramente porque ya e crecido mucho y ya no soy una adolescente y soy ya una mujer joven.

Dimos unos pasos adelante hasta llegar delante de Brian que el aun no había dicho ni mu.

-Hola...Papa.-Dije yo tímidamente intentando hablar bien si que me saliese una voz de gallo.-Hola Belinda, vaya...Si que has cambiado mucho.-Dijo el con una sonrisa.-Gracias, tu también has cambiado mucho, se te notan algunas arrugas en tu frente.-Dije yo bromeando para romper un poco el hielo y lo conseguí, mi padre estaba riéndose un poco y me dijo.

-Ja ja muy graciosa.-Entonces miro a mi novio Borya.-¿Y tu quien eres?

-Hola, soy la novio de su hija, me llamo Borya. Es un placer conocerle señor Brian.-Dijo el con una sonrisa y estrechándole la mano.-Encantado de conocerte Borya. Espero que cuides muy bien de mi hija, que e escuchado que los rusos estáis muy mal de la cabeza.

-¡Papa!-Dije yo quejándome y sonrojándome de la vergüenza.-Tranquila lo estaba diciendo en plan broma, ¿No puedo bromear un poco con el novio de mi hija?

-Tranquila Belinda no me a molestado, tu padre es muy gracioso, mas que el otro.-Dijo el sonriendo.-Ya me estas comenzando a caerme bien chaval, eres muy gracioso.-Dijo Brian y los dos comenzaron a reírse como si fuesen como los mejores amigos de la historia.

-Bueno será mejor que le dejemos solos, mas tarde vendremos a buscarlos.-Dijo el Manager de mi padre, creo.

Todas las personas que estaban en la cafetería incluyendo mi novio, se fueron y solo nos quedamos mi padre y yo.