(Rapunzel narra Flashback)
Se creó un silencio realmente incómodo desde que nos alejamos del banco del cual había recogido a Eugene. No quise mirara atrás porque sabía que Eugene también se giraría y vería a los demás abandonar el banco, tal y como le había pedido a Astrid unos minutos antes por un mensaje en tal caso de que mi plan no saliera bien y volviéramos para atrás. Quería estar a solas con él a toda costa.
No podía tranquilizarme. Estaba muerta de los nervios. Quería que todo esto saliera bien...
—Bueno... yo — traté de decir.
No supe como continuar. Estaba en blanco. Tan solo quería que todo volviera a la normalidad. Pero era tan difícil para mí...
—Lo siento... — dijo Eugene.
Lo miré. Tenía la cabeza gacha y caminaba con una expresión de tristeza.
—No... Lo siento yo — dije para animar a Eugene — No debí tomármelo todo tan a pecho. Estabas en tu derecho a defender a Jack y...
—No seas estúpida Rapunzel — me interrumpió — El que exageró fui yo. Tan solo me inventé una excusa con sentido para enfadarme con Guy.
Nos volvimos a quedar en silencio. Andábamos por el parque sin rumbo alguno. Yo tenía en mente una idea que llevar a cabo, pero se me estaba haciendo imposible. Quería hablar, quería perdonarlo, pero ¿Cómo? No sabía cómo...
Pasaron unos minutos mientras iba pensando en lo que debía hacer, cuando Eugene se paró en seco. Me giré para mirarlo. Aún tenía la vista en el suelo con una expresión no muy alegre. Entonces Eugene se tapó la cara con las manos y comenzó a sollozar.
—¿E...Eugene? — dije nerviosa.
Me acerqué a él para consolarlo. Aunque aún seguía sin saber qué hacer. Puse una mano sobre su hombro.
—Eugene... De verdad que lo siento. No tenía que haberme entrometido, yo...Me caía tan bien Guy y empaticé tanto con lo que me contó...
—¡Estaba celoso! — dijo Eugene levantando la cabeza de golpe para mirarme con la cara llena de lágrimas.
Me quedé callada de la sorpresa.
—Yo... Te quería... Te quiero tanto que... — intentó explicarse entre sollozos — Guy me dio miedo... tenía la sensación de que me estaba robando a mi novia... Y yo... Yo no quería... No quería perderte. Tenía miedo... Yo...
Eugene se volvió a tapar la cara y empezó a llorar aún más fuerte. Sentí que mi corazón se rompía en mil pedazos de tan solo verlo así. Nunca antes le había visto llorar. Noté como mis ojos también se humedecían. No puede evitar hacer otra cosa más que abrazarlo fuertemente. Quería consolarlo, pero era imposible ya que yo también estaba llorando.
—Jamás... — dije llorando — Jamás me perderás.
Al oír aquellas palabras Eugene quitó sus manos de su cara para rodearme con ellos y devolverme el abrazo. Mi cabeza cayó sobre su hombro dejando allí todas las lágrimas que brotaban de mis ojos. Eugene estaba temblando entre mis brazos, como si estuviera aterrizado.
—Te quiero... — susurró Eugene.
—Y yo.
No sé cuantos minutos pasaron, pero estuvimos allí un rato. Necesitamos bastante tiempo para tranquilizarnos, aunque yo en el fondo seguía nerviosa. Comenzamos a andar de nuevo, solo que esta vez íbamos menos incómodos y yo me agarré al brazo de Eugene.
—Entonces... ¿No hemos cortado? — preguntó Eugene.
—Nunca lo hicimos — le contesté con una sonrisa — Sabía que volveríamos a estar juntos. Solo necesitaba tiempo. Nada más.
ESTÁS LEYENDO
Tú decides
FanfictionMiré resentido a Jack. -Todas las mentiras acaban saliendo a la luz Jack...- dije más tranquilo. Jack suspiró y comenzó a dar vueltas por el baño mientras se pasaba las manos por el pelo un y otra vez. Le seguí con la mirada y se paró justo dándome...