Simplemente él.

Capítulo 4.

Me paso el trayecto hasta la casa de Ethan, pensando en lo poco que me apetece ir... hasta que la voz de Ever interrumpe mi estado de trance.

-Nathaly, llegamoss!!!- dice emocionada y me agarra del brazo tirando de mi, hasta el exterior del coche.

-Que manía tienes... ¡¡me vas a dislocar el brazo!!- digo riéndome.

-Uupss, perdón...- se disculpa.

Entramos en la casa y estaba a rebosar de gente, no se como Ethan, ha dejado a toda esta gente sola en su casa un  buen rato.

-Bueno Nathaly, ven con nosotros, que te presentamos al grupo.- me dice Ethan y sonríe.

Voy detrás de Ethan y Ever, hasta el centro de lo que supongo, que es el salón, hay unos 4 chicos y 2 chicas, sentados en un sofá enorme en forma de "c", con una mesa en el centro, que tiene encima unos vasos con un liquido en su interior, el cuál no soy capaz de averiguar que es y lo miro con asco.

-Blake, Neida, cortad el rollo, que os tenemos que presentar a alguien.- dice Ever señalándome y contándoles el rollo a dos de ellos.

-Tranquila nena, solo es vodka- me dice uno de los chicos, ya que me ha debido de ver, mirando con esa cara el vodka y todos se echan a reír. Yo les miro avergonzada.

-Bueno, esta es Nathaly,-comienza ha hablar Ever- mi compañera de habitación en el campus. Nathaly estos son Neida,  Denise, Blake, Owen, Connor y Asthon.-los señala mientras los nombra y me saludan todos menos Blake, que no se inmuta y Nedia y Denise, que cuchichean y se ríen, sin parar de mirarme.

-Vaya, vaya, vaya, ¿qué nos has traído a una virgen?- ella y Denise se ríen a carcajada limpia y los demás solo me sonríen, como si esperaran una respuesta por mi parte y si la quieren aquí la tienen.

-Eso no es de tu incumbencia, pero te diré una cosa, lo que no soy, es una zorra, no como otras.- digo esto y todos se quedan como si hubieran visto a un fantasma.

-Relájate pequeña virgen, solo he preguntado.-me sonríe con  malicia.

-Bueno fieras, vamos a hacer algo además de insultarnos.- dice Owen antes de que conteste a Neida.

-Propón un juego bombón.- me dice Connor comiéndome con los ojos.

Yo me quedo callada, la verdad, es que no se ningún juego, a parte de los que me enseñaron cuando era pequeña, y creo que ellos, no se refieren a ese tipo de juegos.

Neida vuelve a decirle a Denise algo al oído y esta sonríe.

-¿Qué tal si jugamos a prueba o verdad?- pregunta Denise mirándome con una sonrisa maliciosa en su rostro.

-De acuerdo, sera divertido- contesta Ethan y los demás asienten.

-¿Juegas pequeña virgen?- me pregunta Neida.

Si contesto que no, se reirán de mi y si contesto que si, no se lo que pasará...

-Claro- contesto, ella me sonríe, y al segundo me arrepiento de lo que he dicho.

-Empiezas tú Nathaly, ¿verdad o desafío?-dice Blake y le fulmino con la mirada a lo que el me reta con la suya.

-¿Has bebido alguna vez?- dice Ever, antes de que pueda hacerme alguna de las suyas, Blake. 

-No me gusta.

-Lo has probado?- pregunta Asthon.

-No y tampoco esta en mi lista de planes.

La verdad es que nunca quise beber, habré ido a una fiesta o dos y era la única que no bebía...

-Venga estrénate, no seas niña.- me dice desafiante Neida.

-¿Es qué tu, no tienes otro hobbie, que no sea meterte en mi vida?.- le pregunto furiosa.

-Si follar, pero creo que la que lo necesita en este momento, eres tú.- me contesta Neida en tono burlón.

-¿Cómo puedes ser tan asquerosa?.- espeto.

-Uy la virgen, que humos tiene.- me dice.

-Seré virgen, pero lo prefiero antes de ser una asquerosa.- chillo y todos se quedan callados, cuando me doy cuenta de lo que he dicho, antes de que se echen a reír, por el hecho de que soy virgen, me levanto y me marcho en busca de la salida.

Cuando me alejo, consigo escuchar a Ever a lo lejos chillar.

-Neida, ¿estarás contenta no?- Neida, como respuesta se ríe, lo que hace que me enfurezca más.-¡¡¡Nathaly, espera!!!- chilla, pero yo acelero el paso entre la multitud.

-¡¡Es imposible ver la salida con tanta gente dios mio!!- me digo a mi misma frustrada. Me hago paso entre la multitud y al mirar hacia atrás para comprobar si me seguía alguien, me topo con el pecho de un chico muy alto y caigo al suelo por el impacto.

-Mira lo que tenemos aquí- dice y me levanta empujándome hacia la pared.- una princesita... ¿es que has perdido tu príncipe? porque a mi me gustaría serlo.-me mira con una cara que me da miedo e intento escapar, pero me tiene agarrada de las muñecas y tiene demasiada fuerza.

-Suéltame- chillo seria por encima de la musica y de los gritos de la multitud y el se ríe.

Se acerca a mi boca y cuando sus labios están a 2 milímetros de los míos una voz familiar le interrumpe.

-Tú, ¿qué te creés que haces?, suéltala si no quieres terminar muerto.

El que ha estado apunto de besarme, me suelta, bufa y se va dejándome ver quien fue el que me salvó de su sucia saliva.

-¿Blake?- pregunto en shock.

-¿Qué?

-¿Por qué lo has hecho?

-Este, no es sitio para niñas como tú- me contesta y se larga.

¿Cómo puede ser tan cabrón?, yo estaré donde quiera, él no me tiene que decir que hacer o no hacer, ¡será gilipollas!

Camino hasta la salida, intentando que ningún pervertido, se tope conmigo otra vez, por que dudo que el gran gilipollas de Blake, me salvara otra vez.