Capítulo 6 | ¿Habrá química entre nosotros?

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3:00 a.m

Justin entró en la habitación dando un fuerte portazo, en el cual ____ dio un pequeño salto sobre la silla y levantó la mirada, encontrándose de inmediato con la de él.

El chico venía con una bandeja de comida, no se veía de lo mejor pero el hambre y la sed que la chica tenía le hizo verlo como un plato de dioses.

Justin encendió la luz y ____ entrecerró los ojos adaptando su vista a la fuerte iluminación, el chico dejó aquella bandeja sobre una pequeña mesita al lado de la puerta, se acercó a ella con pasos decididos y ____ se encogió en su lugar, el miedo la consumía a cada segundo que Justin estaba en la misma habitación que ella.

El chico sintió un dolor en el pecho cuando ____  se escondió bajo una cortina creada por su cabello, el miedo se podía percibir a metros de distancia, las piernas le temblaban al igual que todo el cuerpo y comenzaba a desesperance hasta el punto de llorar otra vez. Nadie entendía ni sabía que pasaba por la cabeza del chico en aquel instante.

La desató.

_____ levantó la vista cuando sintió las cálidas manos de Justin acariciar sus muñecas y luego sus tobillos.

Justin quedó a centimetros de su cara, la observó unos instantes. ¡Si que es hermosa!, sus ojos, su cabello, sus labios, su nariz fina, todo de ella le llamaba la atención pero no podía ser así, no podía enamorarse, pero estaba seguro que conseguiría un bueno polvo con ella. La observó por otros segundos, admirandola en todo su esplendor. 

______ se sintió fallecer cuando vió el brillo en sus ojos mieles, la firme linea en sus labios perfectamente dibujados, su mandibula  y ese pequeño lunar debajo de su ojo, observó hasta el mas pequeño detalle y volvería a pensarlo y decirlo, ¡Es realmente guapo! 

Justin salió de su transe y se alejó de inmediato de ella y le dió la espalda.

“No digas una palabra” Le advirtió Justin, sabiendo que un –Gracias- saldría luego de su boca.

____ hizo lo que él le dijo y se miró las muñecas y no se sorprendió al ver los hematomas. Justin caminó hacia la puerta y antes de salir se giró a mirarla. “Come” dijo en una orden y salió de la habitación rápidamente.

-¿Que me está sucediendo?, ¿Esta chica me gusta? No, claro que no, son solo las palabras de Harry que se me estan metiendo en la cabeza pero... ella es... ¿como decirlo? es... ¡Callate Justin! Ella no es nada y nunca será nada para tí- 

____ se quedó observando la puerta unos segundos.

-¿Que está sucediendo?-  Pensó - Harry estará en lo correcto, yo... le gustaré a ese chico, porque debo admitirlo, es bastante... guapo y sensual y... ¡Callate _____!-

Miró la bandeja antes correr hacia ella para comer con rapidez y sin delicadeza todo, incluso omitiendo de vez en cuando el cubierto de plástico sobre el plato. Para , ademas del hambre que tenía, olvidar lo que estaba por pasar por su cabeza. 

-¿Habrá química entre nosotros?- pensó en medio de la comida y se regañó a sí misma por lo que estaba pensando.

 -

La comida estaba maravillosa, creyó nunca haber comido algo tan delicioso, se limpió los labios con el dorso de su mano y tomó el jarrón de agua disfrutando de la agradable sensación de frescura en la garganta.

Cerró los ojos, tragó todo, hasta la última gota,  y se dejó caer en el suelo, se acarició el vientre satisfecha, le agradecía a Dios por la comida pero también a Justin, algo que nunca creyó hacer.

¿Qué era lo que había sucedido para que ÉL le trajera la comida?, ¿Por qué aún no la mataba como habría hecho con cualquiera?, ¿Por qué no la dejaba libre de una vez por todas?

Se sentó sobre el suelo, llevando sus rodillas a su pecho y se relajó unos instantes.

“¿Ahora qué?” se preguntó a sí misma en voz alta. Y miró la habitación a su alrededor.

Las oscuras paredes ya no parecían tan tenebrosas, solo unos pedazos de pintura menos, dos grandes agujeros en la pared a su izquierda y una puerta en la pared a su derecha, además de la de enfrente.

Sin prensarlo dos veces se levantó de su lugar  y caminó hacia ella, abrió la puerta y una agradable baño se expuso ante sus ojos.

Sonrió por primera vez en horas y sus ojos se iluminaron, cerró la puerta y corrió para desnudarse y meterse rápidamente a la ducha y darse un agradable baño.

Abrió el grifo y el agua tibia comenzó a caer de inmediato, luego de temperar el agua se metió debajo de la lluvia artificial, el vapor comenzó a llenar el baño por completo, la agradable sensación del agua caliente resbalando por su piel era inexplicable.

Doce minutos, doce minutos exactos duró su ducha.

¿Qué si le había gustado? Claro que no, le había encantado; era la mejor ducha que tomaba en años, esa era su mentalidad, que todo lo que hiciera, tal vez, sería en los últimos minutos de su vida.

Se comenzó a vestir, pero luego de ponerse la ropa interior, sus pantalones estaban sobre el suelo en un pequeño charco de agua, maldijo mentalmente a todo el mundo pero su remera estaba a salvo y todo volvía a calmarse.

¿Qué más daba si Justin la veía? Él la iba a matar.

Así de simple, nada le importaba, nada le llamaba la atención y solo quería morir, AHORA. 

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Dejen sus votos y coemtarios.

Espero les guste esta historia♥

-Carol. 

Imprisoned in your heart | Justin Bieber y Tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora