Latidos de la Noche

Capítulo 32: El bar de Gloria.

Gloria estaba recogiendo los últimos restos de bebidas de su bar. Levantó la cabeza y rió al sentir la presencia de un conocido entrar por su puerta. 

- ¡Ahí estas! - ni siquiera lo miró y siguió su camino con la basura en las manos hacia la barra del bar. 

- Pensé que estabas descansando. 

Un nervioso Stefan apareció en el bar de la bruja. Bajó unas pocas escaleras quedando al mismo nivel que Gloria. 

- Bueno, - Gloria se metió detrás de la barra quedando frente a Stefan. - ahora ambos tenemos un secreto. 

- ¿Qué viste? - preguntó Stefan. 

Gloria suspiró negando mientras guardaba algunas cosas. 

- Lo qué escuché fue lo interesante. - se giró a guardar una botella de alcohol que Stefan tenía en la mano. Este se sirvió el mismo en un vaso un poco de dicho alcohol. - Ya sabes,las chicas con el collar, están hablando sobre ti. 

- No se lo dijiste a Klaus. - dejó al botella en la barra. - ¿Por qué? 

- Porque yo no ayudaría a ese híbrido mestizo con nada. - respondió Gloria al instante. - El collar es un talismán de la mismísima bruja original. - tomó una pausa. - Lo quiero. 

- Bueno, lo siento. No puedo ayudarte. - Stefan dio varios pasos hacia atrás dispuesto a marcharse. 

- No te pongas difícil. - Stefan frenó un poco. -¿Sabes? Odiaría tener que decirle a Klaus lo mentiroso que es su compañero. - En ese instante Gloria ya no estaba tras la barra, estaba delante de ella, dando la espalda a Stefan a la vez que la limpiaba. Odiaba tener que limpiar la suciedad de los alcohólicos que vienen al lugar durante la primera hora. 

Stefan trató de atacarla pero ella fue más rápida. Un dolor crepitante apareció dentro de la cabeza de Stefan. Ella tan solo lo miraba fijamente mientras Stefan se agachaba con las manos en la cabeza junto a un gran mueca de dolor. 

- Supongo que tendré que sacártelo a las malas. 

Stefan cayó desmayado por el dolor al suelo. 

***

El Salvatore se encontraba atado sobre una mesa, rodeado de velas y sin camisa. ¿Que había pasado? De un momento a otro, al ver como Gloria afilaba un pequeño cuchillo viejo y extraño lo recordó. Pero ¿por qué querría ella el maldito collar? 

- ¿Qué es eso? -  se dio cuenta de que no estaba exactamente atado. -¿Por qué no puedo moverme? 

- Relájate. Solo es un hechizo para causar parálisis. - se colocó a la izquierda del sudoroso Stefan. - Nada importante. 

Pasó el cuchillo viejo y extraño por todo el antebrazo de Stefan. Esto causó que Stefan gritara por el daño. Su sangre comenzó a hacerse en una gran cantidad. Aquella herida si que era profunda. 

- Solo tengo que sacar la información de tu linda cabecita. - dio la vuelta al cuerpo de Stefan y se dirigió al otro antebrazo. 

- ¿Sabes? Las brujas de hoy en día - repitió la acción. - están metidas en las cosas de la nueva era, pero... - terminó el corte. -yo soy un poco más del vudú de la vieja escuela. 

Gloria cogió una especie de imperdible oxidado y se lo incrustó en uno de los antebrazos. 

- Esto detendrá esa odiosa regeneración tuya. - la cara de Stefan no podría mostrar más dolor del que estaba mostrando. ¡Aquello era insoportable! 

La sangre goteaba sobre un cuenco en el suelo. 

- No te diré nada. - otro grito desgarrador al sentir el otro imperdible raro en el otro antebrazo.