Latidos de la Noche

Capítulo 34: Temer estar enamorada del todo.

Esa misma mañana, Klaus le informó a ___________ sobre una cena en la noche, antes de visitar a la susodicha bruja. Rebekah ya sabía de esa cena y llevó a ______ a dar una vuelta por Chicago. Puede que hubiera despertado hace menos de dos días pero en lo que conviene a ropa, Rebekah no tardaba en enterarse de lo que se llevaba en esos momentos.

No consiguió sacarle mucho a la muchacha. Solo le compró unos tacones de terciopelo en color negro. Ya era hora de que tuviera algunos en su armario. Lo que más le incomodó a ________ fue la peluquería. ¿Qué pintaba ella en una peluquería como aquella? Absolutamente nada. Pero Rebekah insistió. _________ no hizo otra cosa que quejarse sobre cualquier idea de Rebekah. Ella no quería ser rubia, y muchos menos pelirroja. A ________ le gustaba su pelo largo y azabache, ¿por qué se lo tenía que cambiar?

Rebekah acabó reventada. Le costaría más de lo imaginado hacer que ________ se vuelva un poco más "femenina". ________ entró en el salón donde Rebekah se había tumbado para descansar un rato. Se tiró en uno de los sofás y rió al ver la cara de agotamiento de Rebekah. No admitiría que el peinado le había gustado. De un momento a otro se había levantado hacia la cocina y vuelto con dos bolsas de sangre. Le tendió una a Rebekah y la otra se la quedó para ella.

Stefan había desaparecido y Klaus llegaría en cualquier momento a por ________.

- ¿Qué piensas de mi hermano? - Rebekah fijó su vista en ella. ________ tragó y se removió incómoda.

- ¿En qué sentido?

- ¿Estás enamorada de él? - insistió la rubia.

- Podría hacerte la misma pregunta a ti. - ______ alzó una ceja divertida mientras Rebekah soltaba un risilla. - No lo sé, Reb. Cuando estoy con Nik... estoy extrañamente a gusto. Hace mucho tiempo que no me sentía... bien. Pero no creo que esté enamorada de él.

- ¿No crees o temes estarlo?

________ no respondió ya que no sabía la respuesta. Terminó su bolsa de sangre y subió escaleras arriba a preparase. No quería enamorarse pero Klaus lo estaba consiguiendo.

***

Klaus miraba divertido la vestimenta de ______ al bajar las escaleras. Justo al final de estas se encontraba Rebekah susurrándole lo mucho que lo ha intentado. Klaus vestía con unos vaqueros realmente limpios, una camisa perfectamente alisada de color azul claro y unas deportivas blancas y casuales. No era realmente una cena en todo su glamour.

__________ bajaba muy despacio las escaleras al tener eso altísimos tacones que Rebekah le había obligado a ponerse. Klaus seguía con su sonrisa al verla. Al menos llevaba una falda granate y tacones negros, pero su camiseta negra de Jack Daniels era el toque de _________ Salvatore. Sus labios iba a juego del color de la falda y sus ojos cambiaban a la perfección con el negro del conjunto. Estaba guapísima.

Una vez que llegó abajo, Klaus le tendió la mano para ayudarla a caminar. Valía la pena el sufrimiento que llevaban los pies de _______ si conseguía recibir una mirada llena de admiración y felicidad por parte del original.

- He hecho lo que he... - Rebekah se vio cortada por la voz de su hermano.

- Estás preciosa.

_________ no pudo evitar sonrojarse levemente por el cumplido. Ella observó el atuendo de Klaus y le contestó de vuelta.

- Tú tampoco estás nada mal.

Él rió. _______ se enganchó del brazo de Klaus y juntos salieron de la mansión para meterse en el coche, el cual Klaus conduciría.