Capítulo 37

6K 371 3
                                    

"Dolor interno"

Al salir del baño, estaba envuelta en toalla, y, efectivamente, había una caja en la cama. Dentro de ella, había un vestido de 2 colores. Realmente se asemeja a una camisa y a una falda/pollera, pero están unidas.
Era tanto lo que me demoré, que no alcancé a secar mi cabello.
Bajé las escaleras y llegué al comedor.
Un señor bien vestido, me miraba con una sonrisa amable.

-Señorita, el señor Matt la espera, sígame por favor.

Asentí con la cabeza, estoy segura de que lo he visto, o se parece a alguien.
Él me indicó donde sentarme, en frente de Matt.

-(...) -suspira con una sonrisa -No he elegido mal tu vestido, te queda bien Roth...

Realmente no tengo ganas de hablar con él... Así que sólo miraba.

-¿No me vas a decir siquiera un "Gracias"?
-(...) -suspiro -... G... gracias.
-Qué malcriada estás. Ya van 2.
-¿2? ¿Qué quieres decir con 2?
-2 faltas de respeto, antes de bañarnos, te quedaste y me gritaste. Y ahora tu "Gracias" forzado.

¡TRAGAME TIERRA! Necesito irme de aquí.... No, esto debe ser un sueño. Sí, un mal sueño. Sólo debo pellizcarme y listo.
En frente de Matt, me pellizco el hombro cerrando los ojos.

-¿Pero qué demonios estás haciendo? -me dijo Matt con cierta confusión y molestia en la cara -... ¿Te sigues autolesionando?

Au... Eso dolió.
Sé que no debía cortarme cuando rubia me molestaba, pero era una manera de lidiar mi dolor interno.

-Te he hablado, ¿vas a seguir así de mal conmigo?
-Lo siento.

Terminé de comer y agache mi mirada. Al parecer, Matt se da cuenta de algo ¡Mi cabello mojado!

-Que tonta eres... levántate y sígueme.
-Ok.

Me llevó a un tipo de salón. Habían sillones, mesas, cigarros, entre otras cosas. Todo para pasarla bien.

-Siéntate... -me dijo.
-S... sí.

Me senté y él salió de la habitación.
No se demoró nada en volver. En sus manos, un cepillo, una toalla un secador.

-Pon ese cojín en el suelo y te sientas.

Decidí obedecer sin quejarme, así no tener un 3.
Con delicadeza, puso la toalla debajo de mi cabello, enchufó el secador y comenzó a cepillarme.

-Qué tonta eres, te puedes resfriar y creerán que no te cuido bien.
-Lo siento...

A pesar de sus duras palabras, me trata como si fuera un gatito mojado. Sus manos pasan con cariño. El secador me relaja aún más, cierro mis ojos y me dejó llevar.
Sus manos en mi cabeza me relajan aún más. Así me peinaba mi Mamá.
Al recordarla, se me encoge el corazón. ¿Por qué? ¿Por qué me subastó?
Mi visión de volvió borrosa, me siento sola.
El dolor vuelve a mí...

Subastada? INITIUM [Visión Roth Montalva] I **CORRIGIENDO**Donde viven las historias. Descúbrelo ahora