Subastada? INITIUM [Visión Roth Montalva] I **CORRIGIENDO**

Capítulo 49

"¿Pero qué acaba de pasar?"

He estado con Matt ya 1 año. Me he acostumbrado a él y a seguir su ritmo.
Siempre me regaña, creo que nunca lo voy a complacer.
Una vez iban a golpear a Matt, pero lo defendí, claro, soy cinturón negro en Karate.
Ahí me dijo:

"Por fin haces algo bien, secretaria."

He aprendido que esa es su forma de quererme, o al menos así lo considero yo. También hemos tenido días de descanso. En esos días, que son pocos, Matt no me regaña tanto. Yo me acuesto mirando al techo a pensar, ¿y en qué pienso?, pienso en mi familia, es decir, en Jo, Fer, Tía Carol, Tío Thomas, mi prima y en mi Mamá... ¿Por qué? ¿Por qué me ha subastado? Cada vez que pienso en eso, mis lágrimas salen de mis ojos. Pero no sólo ha sido sobre ellos, sino también en el concierto del Sr. Esteban. Él tiene muchas cosas en mente que son un poco complicadas.
Pero también me mira mucho. Recuerdo la vez que lo conocí, y también el segundo día. Hablamos en un bosque...

"-Es grande el lugar... -dije mirando el cielo.
-Sí. Es bonito, con una bella chica...
-¿Q... qué?
-N... nada... ¿Qué te gustaría estudiar?
-Ah... eh... secretariado...
-¿En serio?
-Sí.
-A mi me gustaría ser un importante cantante o empresario...
-(...) -sonrío -Bueno, entre un cantante y un empresario, hay diferencias.

Él sonrió y me acarició la mano... ¿Qué hago yo para atraer a éste tipo de personas?

-Pero como tú vas a estudiar secretariado... Yo seré empresario para contratarte...

Mis ojos se abrieron de golpe... ¿Me quiere cerca de él? ¡Lo acabo de conocer!"

Pero Matt llegó y se enojó.

"-Suéltala ahora Esteban."

Su reacción me sorprendió. Marcó su territorio.
Copo de Nieve está grande, es una gatita muy linda. Nadie más que Cata y yo sabe de su existencia. Tenemos miedo de que se tenga que ir.
Hoy es un día de descanso... para mí, porque Matt, está sentado en su puesto de siempre, leyendo documentos y tomando café. Se me viene a la cabeza la segunda vez que dormí con él, pero es diferente ahora. Mi mamá sollozaba...

"Matt se despidió de Mamá con un beso y un abrazo... Al parecer le susurró algo en el oído. No alcancé a escuchar.

-Hijita... que te vaya bien...
-¿Qué te dijo Matt?
-Algún día lo sabrás. Adiós hija..."

¿Se refería a esto? Ahí tenía 16 años.
Me giré mirando a Matt. Ahí está él, con sus ojos azules mirando su libro. Ahora que me doy cuenta, él siempre lee el mismo.
Sólo quiero dormir.

Era un nuevo día.
Estaba dando una vuelta chequeando que todo fuera en orden, y decidí que vería el avance del concierto al último.
Pasaron las horas y ya estoy lista.

Fui caminando a la pileta y ahí me encontré con uno de los ayudantes.

-Hola, ¿dónde se encuentra el señor Esteban?
-Ahí, al lado del escalón.
-Muchas gracias.

Fui caminando y toqué su hombro.

-Hola señorita Roth.
-Hola señor Esteban.
-¿Qué pasa señorita?
-Nada, sólo vine a ver como va el trabajo en su concierto.
-Bueno, vea por usted.

Me giré y vi como estaba decorado el escenario. Era espectacular.
Tiene todo lo que él quería: es enorme, tiene cortinas, dispensadores de humo y luces grandes. Tal y como él quería.

-Está espectacular. -dije con una sonrisa.
-Sí.

Lo vi girarse a ver a los demás. Están todos mirando el escenario dándonos la espalda. De repente, el sr. Esteban me tomó del brazo y me atrapó entre un arbusto del tamaño de una pared y él.
Me miraba, pero no decíamos nada, hasta que rompió el silencio.

-Qué suerte tiene él al tenerte como secretaria. Eres la chica más linda que he visto en mi vida.

Mi respiración se corta y él nota mi incomodidad. Se me viene una imagen de Matt salvándome... ¿Por qué?
Se separa.

-Lo siento pero realmente usted me descontrola.
-Señor... -interrumpo -me tengo que ir.
-Sí, claro. Adiós señorita.
-Adiós.

Eso fue raro. Comencé a caminar rápido con mi mirada abajo. Sólo quiero llegar a la habitación.

Entré y me topé con Matt. Me sobresalto.

-¿Pasó algo?

Creo que sigo alterada. Mejor me quedo callada con lo que pasó hace unos momentos atrás.

-No nada, todo bien. ¿Por qué?
-Te veo alterada.

Se acercó y puso su mano en mi pecho para sentir mi corazón.

-Está latiendo muy fuerte. ¿Qué pasó?
-Me sorprendí al verte aquí. Eh... ¿qué puedo hacer?
-Nada. Sinceramente no te creo, pero no tengo ganas de insistir. Te doy la tarde libre, pero sólo puedes estar aquí.
-Ok, gracias. ¿Y tú?

Me estoy comunicando de manera informal... quizás la cagué.

-Estaré aquí leyendo.
-¿No quieres dormir?
-Me sorprende tu actitud.
-Siempre te veo ocupado. Te mereces descansar.

Matt sonrió y me miró. Me dio un beso en la frente y una nalgada para que pasara. Me acosté mirando al techo... ¿Por qué me imaginé a Matt en la situación anterior?
Él me hubiera sacado de ahí y quizás que le habría hecho al Sr. Esteban. Cierro mis ojos.

Me despierto y veo que estoy sola en la cama. Qué raro, eso que son las 1 de la madrugada.
Me giro y veo a Matt... dormido en la silla. Tiene su cabeza apoyada en el libro, se ve tierno.
Decido levantarme y me paro al lado de él.

-Matt, -susurro -despierta, estás dormido en la silla.
-Mhm... shh... -se quejaba.
-Matt... ven.

Puse su brazo en mi hombro hasta sentarlo en su lado de la cama. Lo acuesto y comienzo a desvestirlo. Generalmente él duerme sólo con ropa interior, pero prefiero ponerle el pantalón, ya que hace frío. Al terminar, lo acuesto dentro de la cama y me cambio ropa.
Me acuesto a su lado y vuelvo a dormir.