El concierto terminó y se dirigieron rápidamente al festival. Cuando llegaron estaba abarrotado de familias, niños que corrían de un puesto a otro, amigos que comían todo tipo de dulces y parejas jóvenes y mayores que compartían helado u otra comida especial. Empezaron a caminar cuando, sin darse cuenta, se había separado en parejas.
-¿Dónde estarán? – preguntó Yona intentando localizar a Hiyori y Morgiana.
-Déjales, estoy seguro de que para la hora de los fuegos artificiales nos reuniremos. Vamos, te invito a algo.
-¿En serio? – Yona miraba a Hak confusa. Él no era de invitar y mucho menos en un festival. Parecía estar disfrutándolo mucho y eso que no le gustaban demasiado los festivales ni la playa, Hak era más de estar sentado bajo un árbol o tumbado en la cama dormitando.
Comenzaron a caminar entre los puestecillos, comentando todo lo que veían, la comida que había mientras reían y hacían bromas. En ese momento, Yona chocó con un grupo de amigos que corrían hacia el exterior del festival con la mala suerte de caer al suelo, cuando levantó la vista no veía a Hak por ninguna parte. Se levantó más deprisa asustada al estar allí sola rodeada de tanta gente, a pesar de que Hak era muy alto no lograba verle.
-¡¡HAK!!-gritó pero era imposible que su voz pudiera ser escuchada entre la multitud. Sacó el móvil para llamarle cuando alguien le cogió de la mano.
-¡No te separes de mí! – Hak estaba allí, con la cara pálida. ¿Estaba asustado?
-Lo-lo siento, me choqué y me caí al suelo.
-¿Te has hecho daño? – examinándola.
¿Desde cuándo Hak era tan amable? En otra ocasión se hubiera reído al decirle que se había caído, pensaba la chica cuyo corazón no dejaba de retumbar en su interior, pero más latió cuando Hak la cogió de la mano y tiró de ella.
-Vamos, ni se te ocurra separarte de mí.
Y no lo haría. No lo entendía muy bien pero por nada del mundo quería soltar aquella mano tan cálida. No era la primera vez que agarraba a Hak de la mano, de pequeña lo hacía mucho, igual que con Son Woong pero ahora era diferente, el sentimiento que sentía era diferente.
Continuaron mirando puestos cuando decidieron comer takoyaki y sentarse en uno de los bancos que estaba más cercano al gran parque que había a la espalda del festival. Hak le pidió que esperase allí mientras él iba a comprar, cuando le soltó de la mano sintió un cosquilleo en el estómago y un sentimiento de abandono. Sintió el impulso de correr tras él, volverle a coger de la mano y gritarle que iría con él pero no sabía cómo reaccionaría Hak. Sabía que, a pesar de ser amable, en algún momento saldría su lado perverso y se burlaría de ella.
Observó el festival desde donde se encontraba sentada. ¿Dónde estarían los demás? Miró su móvil y no tenía ninguna llamada de ninguna de las chicas. ¿Estarían bien acompañadas? Sonrió para sí misma al pensar en Morgiana con Hakuryuu y en Hiyori con Yato, los cuatro formaban unas parejas estupendas.
-Pareja ¿Eh? – susurró... en ese momento recordó su reencuentro con Soon Won. No lloró aquella noche que fue rechazada, ni siquiera se sintió triste, simplemente vacía, como si en realidad ese sentimiento ya conocía su destino. No ser correspondido. A pesar de ello Yona se sentía feliz de haberle confesado lo que por tantos años había sentido por él, pero la respuesta de Son Woong le dejó un poco intrigada
- Quizás ese sentimiento que has sentido ha estado jugando contigo.
-¿Jugar? ¿A qué te refieres?
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Vidas de Instituto
RandomCrossover entre 4 de mis muchas OTPs favoritas... Cuatro amigos, cuatro amigas, mismo instituto, diferentes cursos, diferentes clubes, pero varios de ellos forman parte del Consejo Estudiantil y gracias a esa unión los ocho personajes empezarán a fo...