Capitulo 20

29 6 0
                                    

Por mucho que Morgiana llamase a las chicas ninguna contestaba a sus llamadas. ¿Dónde podrían estar? Pensaba dando vueltas y vueltas por el festival. Cansada, con los pies doloridos, se dio por vencida y decidió volver al hostal. Apenas había dormido esa noche y quería descansar pero cuando estuvo a punto de llegar vio algo que la dejó muy descolocada.

-No puede ser verdad...

A pesar de que ya había olvidado todo lo relacionado con él, sus días juntos, todo lo que sentía, de nuevo esa ira y ese corazón roto volvieron a resurgir.

-Será mejor que no mires.-la voz de Hakuryuu la sorprendió mientras éste le tapaba los ojos con sus manos.

-Hakuryuu...-susurró y sintió como sus manos se mojaban.

-Vamos, te enseñaré mejores vistas.- y sin más la cogió de la muñeca y tiró de ella hacia la playa. Corrían entre la gente, sin mirar atrás y Morgiana ya no lloraba. La calidez de la mano de Hakuryuu la tranquilizabn, la hacían sentir protegida, querida.

No tardaron mucho en llegar al paseo marítimo. Había gente pero se podía pasear tranquilamente si encontrarse con personas indeseadas. Anduvieron cogidos de la mano y en silencio durante largos minutos.

-¿Nos sentamos? -sugirió Hakuryuu deteniéndose al lado de un pequeño banco. Morgiana aceptó pero ninguno soltaba la mano del otro.

De nuevo se quedaron en silencio viendo pasar parejas, familias y amigos de un lado a otros. Unos iban al festival, otros regresaban a casa. Parecía que ellos estaban justo en mitad de ambos lados.

-Gracias.

-¿Por?

-Por llegar en el momento oportuno.

-No me las des, simplemente iba de regreso al hostal.

-Hakuryuu, ¿Cómo lo haces?

-¿El qué? -preguntó extrañado.

-El estar siempre ahí para mí. Pasó lo mismo el día que te pegué un puñetazo y hoy también. Dime, ¿Por qué?

-Creo que la respuesta es obvia.-Morgiana sintió sus mejillas encenderse - Tranquila, no te volveré a decir nada más sobre ese tema, quiero que seamos amigos me gusta ser amigos.

-Ah...- esas palabras la dañaron. ¿Amigos? ¿Solo? Morgiana le soltó de la mano y se alejó de él.
-¿Morgiana? ¿Qué ocurre? ¿He dicho algo malo?

Pero Morgiana no le contestaba. Andaba cada paso más deprisa.

-¿Mor-?

-¿De verdad te conformas solo con eso? -le gritó enfadada con los ojos vidriosos.

-¿Eh?

-Pensaba que seguías sintiendo lo mismo por mí.

-Y lo sigo sintiendo. Sigo enamorado de ti, Morgiana.

-¿Y entonces por qué me has dicho esas horribles palabras?

-Pues porque no quiero agobiarte. Nos estamos conociendo y no sabía cuándo debería declararme otra vez. No quería recibir otro puñetazo...

-¡¡ERES UN IDIOTA!!

Varias personas se giraron asustados mientras Hakuryuu la observaba impactado.

-Pensaba que estaban claros mis sentimientos, mis señales.

-Espera, ¿Eh?

Morgiana resopló molesta al ver la cara de desconcierto de Hakuryuu.

Vidas de InstitutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora