Amenaza

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Davina, una gran bruja, se encontraba en un edificio abandonado de una asociacion muy poderosa de vampiros, Los Strix, Davina hace poco perdio a su novio y ahora trata de revivirlo, ella lo ama con todas sus fuerzas, su amor la llevo a estar una semana encerrada buscando como revivir a su novio, el vampiro original Kol Mikaelson.

-tengo un trato para ti Davina-pronuncio aquellas palabras la mujer que quedo a cargo de los Strix despues de que el lider quedara atrapado bajo el mar por culpa de otro vampiro original, Klaus Mikaelson. Aya, la mano derecha del antiguo lider Tristan ahora dirijia cada movimiento de los Strix.

-¿qué te hace pensar que quiero hacer un trato contigo?-escupio Davina molesta, desde la llegada de los Strix todo se ha ido de cabeza, Davina como buena bruja sabia que cualquier contacto con un vampiro era malo, aun asi perdonaba el echo de que su novio era uno y peor, uno original. Ella sabia que esta asociacion conseguia lo que queria cuando lo queria, sabia que era peligroso hacer un trato con ellos.

-querras hacerlo-dijo con sus manos unidas en su espalda y una sonrisa que a Davina le parecio tetrica-los Strix tienen su propio aquelarre de brujas, por lo que se eras la regente de tu aquelarre y te echaron de este cuando mataste a una de tus brujas-dijo Eva burlandose de la joven bruja.

-eso no es de tu incumbencia-dijo Davina completamente calmada, no le molestaba que le echaran en cara sus actos, de echo sentia alivio de no pertecer a su aquelarre que practicamente le obligaba a hacer cosas que las brujas no deseaban.

-como sea-Aya cambio el tema-yo tengo el hechizo de la bruja original para traer a la vida a un Mikaelson, unete a los Strix y te lo dare-Aya traia un papel en sus manos, Davina miro el papel con recelo, no creia en ella y nadie lo hacia.

-no creo en ti, Kol me advirtio sobre ti-dijo Davina con palabras y gesto fuerte, no caeria en sus trampas.

-escucha Davina, lo que realmente quiero es desvincular a los originales de sus linajes, no quiero vivir a la sombra de Elijah por siempre-dijo Aya con enfado.

Davina entendia perfecto, ella odiaba a los originales tambien y queria matar a Klaus pero aun tenia una duda.

-¿y para que me quieres?-pregunto Davina llevando una mano a su cadera en señal de disgusto.

-Kol es el unico que sabe el ingrediente final para el hechizo-dijo Aya, Davina penso en todo lo que Kol sabia, lo unico que le venia a la mente era ¿quien le enseño todo lo que sabe? Claro que ella sabia que el convivio con brujas mucho tiempo pero ¿con que proposito?

-entonces ¿me daras el hechizo primero?-mas que una pregunta sono a orden, Aya rio.

-no soy estupida cariño, tengo un juguete mucho mas interesante-dijo eva y de un cajon de la vieja casa saco una mano humana en perfecto estado, con un poco de polvo claro, que sostenia una vela blanca. Al ver aquella vela Davina abrio los ojos de la sorpresa.

-la mano de Gloria-susurro para si misma.

La mano de Gloria es un objeto oscuro creado para ver a alguien del mas alla, la esperanza de Davina crecio, extrañaba a Kol y verlo aunque sea por un momento la hacia feliz.

-asi es, veras a Kol hasta que la vela se apague y me diras que es lo que necesito para el hechizo, luego te dare el hechizo para traerlo a la vida-dijo Aya severamente, queria vivir sin preocuparse de la supervicencia de Elijah y queria matar al hibrido original tambien, no soportaba que su antiguo amor la abandonara por su hermano.

Davina dudo de aquel trato y de si debia confiar en ella, independientemente de lo que ella decida quedaba la decision de Kol ¿le diria como matar a sus hermanos? Pero que pregunta tan absurda, Kol odiaba a sus hermanos por despreciarlo por tantos años y seguramente le diria.

-trato-dijo Davina segura.

Aya le dio la vela a Davina quien al tenerla en sus manos sus ojos se iluminaron, sonrio inconsientemente, la esperanza de ver a Kol es muy grande para ella. Aya prefirio darle privacidad a la pequeña bruja, tenia que preparar el plan B por si Kol no quiere decir lo que sabe; Davina encendio la vela y dijo un hechizo para invocar a Kol, estaba mas emocionada con cada segundo que pasaba.

De repente en un circulo de sal aparecio el cuerpo de Kol, el se encontraba desorientado, no sabia que pasaba ni porque habia llegado a ese lugar.

-Davina-pronuncio ligeramente al ver a su novia frente a el.

-te extrañe-dijo ella y se lanzo a abrazar a Kol, no podia explicarse la felicidad que ambos sentian.

-no esque me queje pero ¿que hago aqui?-dijo Kol con la tipica sonrisa coqueta que tanto ama Davina.

-necesito algo-dijo nerviosa pues sabia que al decirle que hizo un trato con Aya va a enloquecer pues le habia advertido.

-¿qué es amor?-dijo Kol sonriente.

-tu madre hizo un hechizo para desvincular a tus hermanos de su linaje pero solo tu sabes el ingrediente faltante-solto Davina con nerviosismo, la sonrisa alegre de Kol se deformo, aquella era la pista para saber que su novia hizo un trato con Aya.

-dime que no lo hiciste-rogó Kol con seriedad, se negaba a creer que Davina sea tan inocente.

-ella me dara el hechizo para revivirte Kol-Davina justifico sus actos, pero para Kol no era suficiente, le importaba mas el bienestar de Davina que el suyo.

-no te lo dire Davina, no debiste confiar en ella-dijo Kol molesto, cerro sus puños para controlarse, de cualquier modo el no podia salir de el circulo de sal.

-confia en mi-dijo Davina tomando de las manos a su novio, era injusto o al menos eso penso Kol, ella sabia que el cederia con tan solo una mirada suya, pero debia mantenerse firme por el bienestar de su novia.

-lo siento Davina-dijo Kol soltando las manos de su novia.

-¿que acaso no quieres que tus hermanos mueran? dijiste que los odiabas-dijo Davina molesta, no queria vivir sin el, lo amaba y le parecia egoista que el no quiera estar con ella.

-mis hermanos no me importan para nada, me importas tu y tu bienestar, Aya no es nada confiable Davina-dijo Kol, no esperaba que Davina entendiera solo esperaba que no lo odie por esto.

-adivine que podria pasar esto-dijo Aya entrando a la sala con una caja y las "hermanas" asi se hacian llamar las brujas de su aquelarre.

Kol y Davina se tensaron al ver entrar a Aya y las brujas junto a una gran caja, Kol se odiaria si algo le pasa a Davina.

-Aya-dijo Kol con rencor, odiaba a Aya desde el momento en que metio a Davina en sus problemas.

-cuanto tiempo Kol-dijo Aya sonriendo cinicamente, Kol solo queria arrancarle la cabeza.-veo que no te ha dicho lo que quiero-dijo Aya mirando a Davina quien fruncio el ceño, necesitaba mas tiempo pero al parecer ella esta muy apurada, aun asi nadie dijo palabra alguna-aqui-toco aquella caja- tengo algo que te destruira Davina-escupio Aya con maldad, Kol se tenso, tenia miedo de que lastimaran a Davina.

-¿a que te refieres?-dijo Kol enfadado.

-me refiero a que si no le dices lo que quiero escuchar sacare esto que tengo aqui y destruira a Davina-dijo Aya.

-no confies en ella-dijo Davina susurrando, Kol penso en el pasado y recordo que Aya mentia y engañaba mucho, tal vez sea mentira lo que esta diciendo ahora, tal vez ella no tiene nada ahi dentro que lastime a su novia.

-no creo en ti-dijo Kol apreto la mano de Davina quien tambien apreto la de su novio, con miedo miraron la expresion de Aya.

-es algo que te encantara Kol-dijo Aya sonriendo grande, orgullosa de lo que estaba por hacer.

Same Old Love (Kol Mikaelson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora