OLVIDO♡

Fiesta de Cumpleaños .21.

-Mami –me llamo Abril.

-¿Qué pasa cariño? -le pregunte aun en shock por las palabras que había dicho Justin.

-¿Por qué a mi papá no le agrado Oscar? -me preguntó con el ceño fruncido.

-Tal vez porque él quiere ocupar su lugar -le susurre.

-¿Y vas a permitir que lo haga? -me preguntó ahora Alexis.

-No lo sé -de verdad no lo sabía ya que ambos chicos eran muy diferentes en todos los aspectos.

-Yo solo sé que mi papá es muy bueno, eso decía mi mami -la voz del pequeño Alexis me enternecía mucho.

-¿Por qué? -cuestione con una media sonrisa.

-Un día mami me dijo que papá no se casó nunca con ella ya que se ponía triste de recordar su antigua boda.

Eso jamás me lo esperé, Justin ¿No se quiso casar con Sofía? No podía creerlo porque él tuvo muchos años para reconstruir su vida y no se casó.

De verdad me hacía sentir triste saber que no pudo ser feliz por completo y bueno, yo tampoco lo fui, ni lo soy.

-A veces extraño a su papá porque me hacía muy feliz y me sentía completa al estar a su lado -hable como si estuviera hablándome mi conciencia y yo repitiera todo.

...

Normalmente con Justin en nuestro departamento vivía muchos deja vú, por ejemplo; hoy ya eran las 12:00 de la madrugada y él aún no se aparecía desde que se fue en la cena.

Tampoco tenía alguna idea de donde podía estar porque él ni siquiera conocía a la perfección Chicago como yo.

En mis manos se encontraba el libro "Al final del arcoíris", lloraba y lloraba cada vez que leía capitulo tras capitulo. Era muy sentimental a este tipo de géneros literarios.

Algunos minutos transcurrieron cuando el timbre del departamento se escuchó desde el corredor, me levante y me dirigí de donde provenía el sonido y abrí, la figura del chico rubio estaba frente a mí.

-Estaba preocupada por ti -le mientras el cerraba la puerta.

-perdón por irme así -murmuro, por un momento pensé que estaba ebrio pero no, no lo estaba porque su respiración y palabras eran cuerdas.

-Me quede pensando en lo que dijiste Justin y quisiera que me dijeras la razón por la que lo mencionaste. -dije nerviosa.

-Amber, él tiene razón en lo que dijo. -susurro.

-razón ¿En qué? -le pregunte con el ceño fruncido.

-Yo fui lo peor que te pudo pasar en la vida, todo lo que dijo es cierto Amber y además él ha cuidado de ti y eso es algo que yo no hice...-murmuro mirándome a los ojos.

-Si pero...-intente decir algo pero me interrumpió.

-Y sé que tú nunca me vas a perdonar ya que es muy difícil, yo tampoco me perdonaría. -dijo con seriedad.

-Justin yo no le voy a dar ninguna oportunidad a Oscar, ni siquiera lo he pensado -dije.

A él pareció iluminársele el rostro y sonrió ampliamente, pensé que se acercaría a abrazarme pero solo menciono una cosa.

-Ya puedo dormir en paz -rio y caminamos al nuestros respectivos dormitorios pero no sin antes planear algo para el día de mañana.

...

Al día siguiente desperté muy temprano por el ruido de mi despertador, me levante de la cama con dificultad a la cual le llamo flojera, me vestí con unas prendas que ya tenía lisadas en mi ropero y peine mi cabello con rapidez.

Salí de mi dormitorio sin hacer ruido hasta encontrarme con Justin en la sala, Alexis era nuestro cómplice y mantendría a mi pequeña Abril dormida o distraída hasta que nosotros llegáramos.

Salimos de la casa y subimos a mi auto, yo por supuesto iba a manejar ya que como sabía él no conocía la ciudad, nos dirigimos a la juguetería de la plaza.

Cuando llegamos había infinidad de juguetes para niña muy bonitos pero yo buscaba uno en especial para Abril, llegamos al pasillo donde se encontraban los juguetes para niña, en unas repisas estaba la muñeca que tanto quería mi hija, la tome entre mis manos y vi como Justin tomaba otros 3 juguetes.

Ambos nos dirigimos a la caja para pagar, en el momento que extendí la tarjeta Justin hizo que le cobraran los demás juguetes y pago el, me moleste por ello, salimos de la tienda.

-No te enojes Amber, tómalo como una compensa para Abril –hablo rápido mientras me seguía el paso.

-Yo le quería comprar algo –dije molesta.

-Te dejare que le compres el pastel –dijo y después estallo en una carcajada contagiándome a mí también.

-Está bien Justin, yo comprare el pastel –reí.

Nos dirigimos al auto y metimos las bolsas a la cajuela, cerré de nuevo el auto y caminamos de regreso ahora dentro del centro comercial para buscar la pastelería.

Dentro de ella escogimos un pastel de chocolate parecido a un gansito gigante, una vez en la caja Justin dejo que lo pagara y me sentí feliz por un momento.

Nunca creí que estuviéramos juntos comprando regalos para el cuarto cumpleaños de Abril, nuestra hija.

Caminamos hasta el estacionamiento y subimos al auto, Justin decidió manejar de regreso pero pidió que le diera instrucciones para que no nos perdiéramos tan temprano, seguro eran como las 7:00 de la mañana, llegamos después de unos 15 minutos al departamento, entramos a este y aún no había señales de Abril despierta.

...

Paso hora y media cuando Alexis ya estaba con nosotros esperando que Abril despertara para que viera la sorpresa de cumpleaños que le habíamos preparado, el departamento estaba decorado con globos rosas y una pancarta que Justin había escrito, escuchamos la puerta del dormitorio abrirse y en nuestro campo de visión estaba Abril tallándose sus ojos.

-¡SORPRESA! –gritamos los tres juntos, Abril nos miró sorprendida y con una gran sonrisa.

-pensé que lo habían olvidado –dijo, se acercó e hicimos un abrazo grupal.

-Estos son tus regalos –dijo Justin.

-Gracias papi –ella los tomo.

-Tu mamá y yo haremos lo posible para que la pases maravilloso –dijo Justin entusiasmado y yo solo reí como respuesta.

-Tengo el mejor regalo, que estemos como una familia –dijo mi hija con la felicidad desbordando.

¿Éramos una familia? Actuábamos como una pero sin fingir nada ya que todo nos salía del corazón y sin pensarlo.

Justin me miro con una sonrisa, sabía que las palabras de Abril le habían hecho el día, el mes y el año.

-Veras que muy pronto dejaremos de vernos como una y la seremos –hay no, ¿Eso lo dije yo? Si, si fui yo.