Tan Solo un Baile

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   ¡An-nyeong-ha-se-yo! Mi nombre es Jo Youngmin.

Incliné mi cuerpo hacia adelante en una reverencia. Había audicionado, bueno más bien intentado audicionar para algunos papeles en dramas e incluso en obras musicales. Pero ninguno de mis esfuerzos funcionó, ya que ni siquiera me dejaron mostrarles mi talento. Simplemente con escuchar mi nombre me rechazaban inmediatamente. Mi madre había hecho un buen trabajo pagándoles para no contratarme, pero no iba a rendirme tan fácilmente.

- Sólo podemos aceptarte como un extra. Tal como gente caminando por las calles o actuar como un recepcionista de hotel. Algo como eso. – el Director me informó.
- Yo... yo estab...
- Sé que esperabas por lo menos un papel terciario. Pero eso es todo lo que puedo ofrecerte por lo pronto.
- Entiendo. –murmuré rechinando mis dientes. ¿Acaso hablaba en serio? ¿Yo como un extra? Aghh...
- ¿Tomarás la oferta? – se cruzó de brazos.- Decide rápido. Tenemos más gente esperando por la audición. - ¿Acaso tenía alguna otra opción?
- Sí, eso estaría bien para mí por ahora. –sonreí.

Di vuelta sobre mis tobillos y solté un gran suspiro. Eso era lo mejor a lo que podía aspirar en ese momento. Mi estómago gruñó en señal de hambre. Eran ya pasadas de la medianoche así que me dirigí a una tienda cercana a comprar ramen y una botella de agua.

Una sonrisa se formó en mis labios mientras cenaba en mi pequeño y húmedo departamento. El hecho de saber que el día de mañana me encontraría con Sumi me entusiasmaba. Tenía que alentarme a mí mismo, ya que sabía que no sería fácil llegar a ella de nuevo, pero tenía que aprender a ser paciente.

A la mañana siguiente, me levanté temprano para tomar una ducha. El agua estaba helada, pero prefería tomarlo como un "baño refrescante". No debería de quejarme después de todo, ya que al menos tenía agua y un techo.

Tomé mi mochila y caminé hasta la parada del autobús. ¿Les había mencionado antes que no sabía cómo usar el transporte público? Pero gracias a Sungmin y su amabilidad, pude aprender algunas cosas acerca de ello. Así que ahora, iría a mi primer día a la universidad.

Caminé dentro del edificio y me dirigí hacia mi primera clase del día. Por supuesto, tenía que comenzar mis estudios en primer grado, por lo que Sumi no estaba en ninguna de mis clases. Aun así, ya encontraría alguna forma de verla en la escuela.

Presté mucha atención a todas mis clases ya que necesitaba obtener buenas notas para mantener mi beca. Fue muy amable de parte de algunas chicas que me prestaron sus apuntes para ponerme al día en las lecciones de las clases. Tener un físico atractivo trae sus beneficios.

El receso finalmente había llegado y eso significaba que al fin tendría la oportunidad de pasar un tiempo con mi Honguito. Caminé hasta la cafetería y la busqué con la mirada. Ahí se encontraba ella, no muy lejos de mi posición. Estaba sentada alrededor de una mesa con Changbum y... ¿Lee Taemin? Esperen, ¿ellos aún son cercanos?

Está bien, no entres en pánico Youngmin.
Seguramente solo eran amigos, eso era todo. Pero ahora, ¿podía hablar con ella? ¿Cómo podía acercarme? Ella probablemente todavía me odie. De todas formas no puede evitarme por siempre. Soy Jo Youngmin después de todo.

- ¡Hola chicos! – me abrí paso y me senté al lado de Sumi.
- ¿Youngmin-ssi? – Taemin ladeó su cabeza en señal de confusión.
- ¿Quién te dijo que eras bienvenido en esta mesa? – Changbum me fulminó con la mirada. Ok, este ratoncillo me está sacando de mis casillas.
- Es sólo que soy nuevo aquí y tenía mucho tiempo que no veía a Sumi y a Taemin-ssi. Ellos son buenos amigos míos.
- No sé realmente acerca de Taemin, pero yo no soy tu amiga. Así que... -Sumi murmuró.
- ¿Escuchaste bien? –Changbum enarcó una ceja.
- No estoy hablando contigo. – le lancé una mirada furiosa.
- Youngmin-ssi, por favor encuentra otro lugar donde sentarte. – Taemin me miró con expresión de disculpa.
- Yo sólo quería hablar con ustedes chicos. – me levanté de mi asiento y me encogí de hombros.

Mi Novio es el Rey de los CretinosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora