HERÓNIMO
Imposible ponerme una camiseta con mi brazo enyesado y opto con ayuda de Marcello, por una camisa blanca.
Más accesible de poner y más cómodo.
Salgo del ascensor y camino por el estacionamiento del Blustery con Collins a mi lado y en dirección al BMW gris estacionado en su parking, para recoger a Vangelis del Holding.
- ¿Todo está listo? - Le digo, acomodando con mi mano el cuello de mi camisa, dejando los tres primeros botones del cuello abiertos y mirando serio hacia adelante.
- Sí, señor Mon. - Dice, abriendo la puerta trasera para mí. - El señor Eliot Hart, se está encargando de movilizar la gente.
Bien.
De forma nerviosa paso mi mano por el pelo una vez dentro, mientras el coche se mezcla entre el tráfico y las calles.
Acomodo mis lentes y suspiro.
Y mis ojos bajan al sobre de papel madera que dejé sobre el asiento a mi lado y lo acaricio.
Espero que sea perfecto para mi nena, también.
YO
Apoyo mi barbilla en mi puño, mirando la pantalla de mi compu y jugando con mi bolígrafo entre mis dedos.
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La pasión de Vangelis®
RomantikVangelis Coppola. Empleada de una de mis empresas. Mi rayo de sol. Mi nena. Simple, graciosa y algo torpe. La mujer a la que le pido casamiento y la muy cabrona, me rechaza. Sí. Sí, lo sé...porque mis propuestas apestan. Bonita. Testaruda. ...